Prospecto de los Rockies de Colorado en el beisbol de Grandes Ligas, Mateo Gil se integró a la pretemporada de los Sultanes para lo que será el cuarto año del Monterrey en la Liga Mexicana del Pacífico.
El jugador de cuadro dijo estar entusiasmado por llegar a una franquicia en la que jugó su padre, Benjamín Gil, como pelotero activo.
Mateo llega procedente de los Tomateros de Culiacán en un préstamo por la siguiente campaña, con la opción de quedarse en definitiva con los Fantasmas Grises.
“Estoy emocionado por la oportunidad de jugar en Sultanes, mis compañeros han sido muy amables, me han dado una cálida bienvenida…el estado es maravilloso, es un estadio de Grandes Ligas, estoy emocionado por verlo con fans”, declaró Mateo.
“El objetivo es jugar lo mejor que pueda en cada oportunidad y ayudar al Monterrey a ganar el título”.
El pelotero de 22 años de edad participó en el verano en Clase “AA” de los Rockies, donde tuvo números de .246 de promedio, con siete cuadrangulares y 27 carreras empujadas.
El parador corto y tercera base había jugado los tres inviernos anteriores para los Tomateros.
El equipo regiomontano buscó agregar un jugador de cuadro, ante la salida de Héctor Mora, quien estará ausente en octubre al ser convocado a la selección que competirá en el Mundial Sub 23.
En la práctica vespertina realizada este martes en el Estadio Mobil Super también reportó el relevista zurdo, Iván Salas.
El entrenamiento ya fue dirigido por el manager, “Jerry” Álvarez, quien se presentó luego de concluir el trabajo que tiene en verano con los Piratas de Pittsburgh.
Previo a comenzar la jornada, el equipo recibió un mensaje del presidente del consejo de los Sultanes, José Maiz García.
Los Sultanes informaron que fueron dejados en libertad los lanzadores, Terance Marín y David Pérez.
AM