El 2023 podría registrar el punto máximo del índice inflacionario derivado de una recesión económica que podría impactar al vecino país del norte y aunque se estima que el Producto Interno Bruto llegue al 3.4 de incremento en el país, en la reciente reunión de ejecutivos en finanzas con Jonathan Heath, subgobernador del Banco de México se avizoraba un incremento en la confianza del consumidor.
Para el economista lagunero, Jorge Reyes, las elecciones en Coahuila y el Estado de México favorecerán un aumento en el circulante en la economía de estas entidades, mientras que para los estados del norte del país, la guerra comercial entre Estados Unidos y China favorecerá la llegada de inversiones a nuestro país, donde La Laguna registra altas probabilidades por sus beneficios en conectividad.
Para este año, la estimación es de una posible recesión en Estados Unidos, combinando con los altos niveles de inflación en México, mantiene los pronósticos de un año estable sin cifras alegres de crecimiento, pero si con la recomendación a la población de mantenerse alerta tanto a nivel doméstico como empresarial, manteniendo un especial cuidado del gasto, planificando las erogaciones y dando prioridad al pago de servicios para no gastar más del dinero que ingresa a los bolsillos.
El aumento en el precio de los productos primarios, prácticamente ha rebasado el incremento al salario mínimo, pues a la par para que las empresas tengan la suficiente solvencia para cumplir con el pago de sus nóminas y prestaciones laborales deberán llevar el impacto económico al consumidor final.
“También vemos que el incremento de los días de vacaciones y salarios mínimos, y la falta de apoyos del Gobierno Federal también va a impactar en los costos finales de los productos para la comunidad porque los empresarios también tendrán que subir sus precios”, concluyó.