No lo parecen, pero las abejas son una de las grandes razones por las que la humanidad está viva. Pero gracias a la contaminación y a la deforestación, su población está desapareciendo y podría tener consecuencias catastróficas para nuestro planeta. Es por eso que si eres un amante de la naturaleza, hay algo muy simple que puedes hacer para aportar tu granito de arena.
Por miles de años, los humanos usamos los recursos de la tierra y llevamos a millones de especies a la extinción. Podemos decir que no sabíamos lo que hacíamos en ese entonces, pero ahora si lo sabemos. Las abejas son polinizadoras. Son responsables de alimentar al 90 por ciento de la población mundial.
Las abejas juegan un papel crucial en nuestro ecosistema, especialmente en la polinización de plantas. Sin embargo, es común encontrarse con abejas en el suelo que parecen estar en apuros. Saber si una abeja está muriendo o si se puede ayudar es fundamental para contribuir a su preservación.
¿Cómo saber si una abeja está muriendo?
Primero, es importante identificar si la abeja está realmente muriendo. Las abejas que están cerca de la muerte suelen presentar ciertas señales claras:
- Falta de movimiento: Una abeja moribunda se moverá muy poco o nada.
- Apariencia flácida: Si la abeja parece débil, con las alas extendidas y sin fuerza, es posible que esté cerca de la muerte.
- Respiración lenta: Observa el movimiento del abdomen. Una respiración extremadamente lenta puede indicar que la abeja está en sus últimas etapas de vida.
- Heridas visibles: Si la abeja tiene partes del cuerpo dañadas, como alas rotas o partes faltantes, es probable que no sobreviva.
¿Cómo ayudar a una abeja exhausta?
Si la abeja muestra signos de agotamiento pero no está gravemente herida, es posible ayudarla. Aquí hay algunos pasos que puedes seguir para darle una oportunidad de recuperación:
- Proporciona una solución azucarada: Mezcla una pequeña cantidad de azúcar con agua para crear una solución azucarada (evita la miel, ya que puede contener patógenos perjudiciales para las abejas). Coloca unas gotas cerca de la abeja para que pueda alimentarse y recuperar energía.
- Transfiere la abeja a un lugar seguro: Si la abeja está en un lugar peligroso, como una acera concurrida, usa una hoja o un trozo de papel para moverla a un área más segura y tranquila.
- Evita tocarla directamente: Si es necesario mover a la abeja, hazlo con cuidado usando un objeto como una hoja o un pequeño recipiente. Evita tocarla con las manos para no estresarla ni dañarla accidentalmente.
¿Cómo proteger a las abejas y por qué son importantes?
Las abejas son vitales para la biodiversidad y la producción de alimentos. Más del 70 por ciento de los cultivos alimentarios dependen de la polinización por insectos, y las abejas son responsables de una gran parte de este proceso, por lo que proteger a las abejas es proteger nuestro medio ambiente y la seguridad alimentaria.
Es crucial evitar ciertos comportamientos que pueden dañar a las abejas:
- No uses pesticidas: Los pesticidas son extremadamente dañinos para las abejas. Opta por métodos de control de plagas naturales y orgánicos.
- No intentes manejar abejas sin experiencia: Si encuentras una colmena o un grupo grande de abejas en un lugar inapropiado, contacta a un apicultor profesional en lugar de intentar manejar la situación por tu cuenta.
Saber cómo identificar y ayudar a una abeja en apuros puede hacer una gran diferencia en su supervivencia y, en última instancia, en la salud de nuestro ecosistema. Tomando medidas simples, como proporcionar una solución azucarada y evitar el uso de pesticidas, todos podemos contribuir a proteger estas criaturas vitales.