Con motivo del Día Mundial del Accidente Cerebrovascular, que se conmemora este 29 de octubre, es fundamental aumentar la concienciación sobre esta grave afección, los accidentes cerebrovasculares.
En México, las enfermedades cerebrovasculares han afectado a un total de casi 43 mil personas en 2024, según el Boletín Epidemiológico Nacional 2024.
Esta cifra resalta la urgencia de saber cómo identificar un accidente cerebrovascular para actuar de manera oportuna.
En entrevista con Telediario, el neurocirujano, Julián Enríquez Álvarez, compartió información clave sobre los signos y síntomas que pueden indicar que alguien está sufriendo un accidente cerebrovascular, enfatizando la importancia de reconocer estos indicios para buscar ayuda médica inmediata.
Qué es un accidente cerebrovascular
En términos simples, el accidente cerebrovascular (ACV) es una emergencia médica que ocurre cuando se interrumpe el flujo sanguíneo al cerebro, lo que puede provocar daño cerebral.
Existen dos tipos principales: el ACV isquémico, causado por un coágulo que bloquea un vaso sanguíneo, y el ACV hemorrágico, que ocurre cuando un vaso sanguíneo se rompe y provoca sangrado en el cerebro.
Reconocer los síntomas a tiempo es crucial para recibir tratamiento y minimizar daños.
Cómo identificar si alguien está teniendo un accidente cerebrovascular
Identificar un accidente cerebrovascular (ACV) rápidamente es crucial para recibir tratamiento a tiempo. Algunos signos y síntomas mencionados por el especialista son:
- Debilidad repentina: Pérdida de fuerza o entumecimiento en la cara, brazo o pierna, especialmente de un lado del cuerpo.
- Dificultad para hablar: Problemas para hablar, pronunciar palabras o entender lo que otros dicen.
- Alteraciones en la visión: Pérdida repentina de la visión en uno o ambos ojos, o visión borrosa.
- Problemas de equilibrio: Mareos, pérdida de equilibrio o coordinación.
- Dolor de cabeza intenso: Un dolor de cabeza súbito y severo, que puede ser diferente a cualquier dolor de cabeza anterior.
Esto debes hacer si identificas que una persona está sufriendo un ACV
Una vez que se ha identificado un accidente cerebrovascular en una persona, el Dr. Julián Álvarez enfatiza que lo más importante es buscar atención médica de inmediato, acudiendo a un servicio de urgencias.
“El tiempo es cerebro, lo mejor que se puede hacer ante una persona que está en sospecha de tener un ACV, es llevarlo de inmediato a un hospital. Mientras más pronto se reciba el tratamiento, mayor es la posibilidad de que el paciente quede con menor grado de secuelas y disminuya su morbilidad y mortalidad”, menciona el especialista.
Después de que se solicita la atención médica a la persona afectada, lo primero que se hace es estabilizar al paciente.
El Dr. Julián señala que “dentro de los estudios que se deben realizar, si se sospecha un ACV isquémico, el estudio más adecuado es una resonancia cerebral. En cambio, si se sospecha un ACV hemorrágico, la tomografía computarizada de cráneo es la mejor opción.”
Estas pruebas son fundamentales para determinar el tipo de ACV y guiar el manejo adecuado del paciente.
¿Cuál es el tratamiento? ¿Se requiere cirugía?
La necesidad de cirugía tras un accidente cerebrovascular depende de varios factores, incluidos el tipo de ACV, los síntomas presentados y el grado de gravedad de la enfermedad.
El especialista en neurocirugía explica que "en el caso de los ACV isquémicos, el manejo puede incluir medicamentos que ayudan a disolver los coágulos conocidos como trombolíticos".
Sin embargo, en situaciones donde el ACV es más extenso, puede ser necesario recurrir a la cirugía. Y en caso de eventos hemorrágicos, en muchas ocasiones se requieren cirugías para evacuar la hemorragia.
Agregó que, en algunos casos, se requieren cirugías para descomprimir la presión aumentada que puede resultar de un infarto cerebral.
Recuperación de una persona tras un accidente cerebrovascular
La recuperación de una persona que ha sufrido un accidente cerebrovascular es un proceso fundamental que requiere atención especializada.
Según el Dr. Julián, "es muy importante la rehabilitación, independientemente de si el tratamiento fue médico o quirúrgico".
Esto se debe a que muchos pacientes experimentan discapacidades, como debilidad y alteraciones en el lenguaje, que pueden persistir después del evento.
“La rehabilitación física, tanto motriz como de lenguaje, es crucial para que el paciente pueda mejorar su calidad de vida", resalta.
Este proceso ayuda a los pacientes a recuperar habilidades y adaptarse a las secuelas del ACV, facilitando así su reintegración a la vida cotidiana.
Con qué personal de salud acudir tras sufrir un accidente cerebrovascular
El personal de salud adecuado para atender a un paciente que ha sufrido un accidente cerebrovascular puede variar según la causa y el grado de afectación neurológica.
El Dr. Julián señala que los accidentes cerebrovasculares son tratados tanto por neurólogos como por neurocirujanos, mientras que el tipo de tratamiento varía, pudiendo ser tratamiento médico, quirúrgico, endovascular o alguna combinación de estos.
Cómo evitar que surja otro accidente cerebrovascular
Evitar que surja otro accidente cerebrovascular es crucial para la salud de los pacientes que han experimentado este evento.
Ante esto, el especialista enfatiza la importancia de acudir a las terapias de rehabilitación física y de seguir el manejo o apego a los medicamentos que se deben administrar después de sufrir un ACV.
“Cuando hay un accidente cerebrovascular, también aumenta el riesgo de tener otro evento de este tipo. Insistir en la rehabilitación y en el tratamiento es fundamental", advierte el Dr. Julián.
Estas acciones son esenciales para mejorar la calidad de vida y reducir el riesgo de futuras complicaciones.
Por último, el Dr. Julián concluyó resaltando la importancia de la prevención en el contexto de las ACV.
"Lo mejor es la prevención", afirma, "ya que muchas veces, cuando se presenta un accidente cerebrovascular, es algo súbito y las secuelas que podemos tener son casi siempre muy significativas".
Además, subraya que lo ideal es tener un estilo de vida saludable y encaminar nuestras acciones no hacia el tratamiento de la enfermedad una vez que se presenta, sino a prevenir que esta llegue a su severidad.
Este enfoque proactivo es clave para reducir el riesgo de sufrir un ACV y mejorar la calidad de vida a largo plazo.
bimc