La activista Summer Willis recorrió este viernes Central Park en un maratón organizado por ella misma, esto con la intención de conmemorar el Día Internacional de la Mujer y crear conciencia sobre las agresiones sexuales, pero el trayecto lo hizo con un pesado colchón en su espalda.
En medio del famoso parque neoyorquino, Willis, destacaba entre la multitud por el distintivo colchón que cargaba en su espalda y en el cual plasmo un ave fénix, en donde se podía leer "en las cenizas encontramos nuestra fuerza".
Relató que, durante su época de estudiante en la universidad, un hombre echó algo en su bebida para después violarla, fue un suceso que trajo como consecuencia para ella depresión y estrés postraumático durante años, hasta que tomo la decisión de dejar atrás su lugar de origen y empezar de cero.
"Cada vez que pienso en estos años de mi recuperación me imagino como el ave fénix, que renace de sus cenizas. Hoy no estoy deprimida, no tengo estrés postraumático e, incluso con el peso de un colchón, todavía puedo encontrar la luz", contó Willis mientras hacía su tercera ronda en Central Park.
Para la activista, el colchón simboliza que está cargando con todo el peso de las agresiones sexuales para que ninguna otra mujer tenga que cargar con ese peso sobre de ella.
A pesar de que en su carrera recorrió Central Park sola, la joven contó que otras mujeres se habían unido en su camino y la habían acompañado durante algunos tramos, felicitándola y transmitiéndole fuerzas para terminar el recorrido.
- Comunidad
El trauma que le generó la agresión la llevó a crear la fundación 'Strength Throught Strides', con la que este año lleva a cabo una iniciativa en la que correrá en 29 maratones para recaudar 290 mil dólares que destinará a organizaciones que apoyan a víctimas de abuso sexual.
Al término de la carrera, la estadounidense alcanzaba, además, un récord, convirtiéndose en la primera mujer en llevar a cabo una maratón con un colchón a la espalda.
"Antes no era corredora, me parecía algo difícil, apenas podía correr un kilómetro y medio, pero quería demostrarme a mí misma que soy más fuerte de lo que pensaba. Creo que correr ayuda a las víctimas de agresión sexual y a todo el mundo a darse cuenta de su potencial y su capacidad de recuperación", dijo la activista.