La temporada del Día de Muertos es muy especial para los alfareros del Barrio de la Luz por la producción de sahumerios y candeleros para las ofrendas. Este año ya están preparados para cubrir la demanda.
En entrevista para TELEDIARIO, Arturo López Cano, presidente de los alfareros de este barrio antiguo de la capital poblana, señaló que continúan recuperandose de la pandemia y desde agosto comenzaron con la producción, por lo que esperan un 60 por ciento de incremento en sus ventas.
Previo al Día de Muertos, los alfareros se concentran en hacer candeleros y sahumerios, dos de los principales objetos para adornar los altares y ofrendas durante el 2 de noviembre.
Este año, los precios de las artesanías van desde los 130 pesos por una pieza miniatura, juguete de 220, mediano 350 y grande hasta 380 pesos. Los municipios de Huaquechula y Tochimilco son los principales compradores por su tradición de colocar ofrendas monumentales.
En esta temporada de Todos Santos, la venta de artesanías incrementa e incluso en esta época los clientes llegan al centro alfarero a surtirse para realizar sus ventas en municipios de Puebla u otros estados, por eso la producción tiene que hacerse con tres meses de anticipación, cuando comienzan con los pedidos.
El representante de alfareros explicó que hay gente que les pide hasta 50 gruesas, considerando que cada gruesa contiene 144 piezas.
¿Cómo hacen las artesanías de alfarería en el Barrio de la Luz en Puebla?
Arturo López Cano detalló que el material con el que trabajan los alfareros en el Barrio de la Luz es el barro del municipio de Amozoc, el cual es preparado en uno de los cuartos destinados para preparar la materia prima.
Después, comienzan con a elaborar las artesanías para darle una primera quema, denominada 'cahuete', luego se le coloca el esmalte, brillo, color y se vuelve a ingresar al horno durante más de seis horas.
Contó que algunos trabajadores sacaban las enormes cazuelas de barro utilizadas para el mole en las fiestas y, con orgullo, narró que cuentan con un horno de 200 años de antigüedad.
El maestro alfarero precisó que hay personas que compran desde el menudeo hasta mayoreo, y después de los artículos mencionados, las cazuelas son las más vendidas, las cuales son utilizadas para preparar mole y tienen un costo de mil 200 pesos en este lugar, pues en el mercado aumentan más de mil pesos.
Alfareros del Barrio de la Luz mantienen vivo el oficio en Puebla
Con nostalgia narró que todos los días trabajan con amor para que este oficio no se pierda, pues ya son más de cinco generaciones que los alfareros le dan vida al Barrio de la Luz.
Recordó que aprendió de su padre y posteriormente su conocimiento lo transmitió a sus hijos y, sus hijos a los nietos y ahora a los bisnietos, quienes están comprometidos con las artesanías que se elaboran.
Indicó que con seis generaciones luchan para que este oficio no muera, por lo tanto, trabajan 15 familias en este lugar, quienes elaboran desde 30 a 70 piezas diarias para que sus artesanías se vendan tanto en Puebla como en otros estados de México.
Asimismo, comentó que generan más de 100 empleos entre los hijos, sobrinos y nietos, quienes conforman la asociación, siendo en su totalidad hombres, al comentar que los tiempos han cambiado y las mujeres ya no se involucran.
“Hemos luchado bastante, nos ha costado mucho trabajo desde que en el 2001 fue expropiado el inmueble, pero no hemos tenido apoyo de las autoridades y les hemos pedido que se convierta en un corredor artesanal como hay en otras partes del país para atraer turismo y más ventas”, enfatizó.
Agregó que la meta es exportar todas sus artesanías a otros países, y así sean valoradas en otros países.
Por último, comentó que son muchas las personas que llegan al lugar a buscar una cazuela para cocinar sus platillos para sus fiestas o de manera cotidiana, así como la elaboración de ollas para las piñatas, aunque dijo que esta producción disminuyó pues ahora se hacen de cartón.
AGA