La periodista Anabel Hernández, autora del libro "Emma y las Otras Señoras del Narco" en entrevista con Víctor Martínez, reflexiona sobre cuál es el verdadero motivo para que sea próspero el negocio de las drogas en México.
- En algunas otras entrevistas a gente que se ha dedicado a saber un poco también de este asunto del narco yo les he preguntado algo que parece muy simple: siempre se habla del tejido social, se habla de la situación de falta de oportunidades en nuestro país es el caldo de cultivo para que se generen esos narcos y las pandillas y en los cinturones más bajos... ¿Eso es un mito? ¿Esto es algo que no es del todo cierto?
- Yo sí pienso que no es toda la razón ni siquiera el 30 por ciento de la motivación. Yo nací en 1971 desde que yo nací más de la mitad de la población en México es pobre y de pobreza extrema. Tú sabes que en México hay población que no tiene ni para comer mañana. En el 71 72 73 74 etc. etc. ¿vivíamos este nivel de violencia?, ¿vivíamos este nivel del narco cultura? vivíamos a nivel de penetración en toda la clase social? ¡No! No la vivíamos, es decir pensar que la gente sólo es narco por pobre es también un poco elitista, ¿Qué la clase media no es narco? ¿Qué los multimillonarios yuppies no se vuelve narcos? Yo lo que te puedo decir es que sí yo sí he visto gente de la clase media y de la clase alta que se mete a traficar drogas y que no tienen necesidad, simplemente es avaricia yo creo que es la cultura de la legalidad el grandísimo hueco, hoyo negro, de justicia y de impunidad que hay en México el principal aliciente para que cualquiera, si el presidente puede, si el gobernador puede ¿yo porque no? Estamos hablando de qué la propia impunidad alienta a todos a meterse al negocio criminal no es la pobreza... no es la pobreza el principal detonador.