"Estudioso y deportista": Así era Ángel Yael estudiante asesinado por elemento de la Guardia Nacional

Sus compañeros lo definen como una persona sana y alejada de los vicios, ya que inclusive practicaba Basketball en las instalaciones de la universidad

Quién era el estudiante asesinado por la Guardia Nacional en Irapuato
Irapuato, Guanajuato /

Con tan solo 19 años de edad, Ángel Yael Ignacio Rangel, tenía un futuro prometedor, estudiante de la Universidad de Guanajuato en la Carrera de Agronomía, su desempeño académico sobresaliente lo llevó inclusive a adelantar materias y tomar clases con estudiantes de semestres más avanzados, donde hizo buenas amistades.

“Cuándo entramos a las clases presenciales empezó a tomar materias con nosotros de quinto semestre, él era muy dedicado y gracias a que le echaba muchas ganas a la escuela adelantaba materias con nosotros en quinto semestre, era trabajador era deportista y jugaba basquetbol en la escuela” explicó Carlos Zarate, estudiante de la UG Campus Irapuato

El joven que egresó como técnico laboratorista del CBTIS 65 de Irapuato, realizó prácticas en la Unidad Irapuato del Centro de Investigación Avanzada, de ahí su notable vocación por la investigación.

"Él era muy buenísimo para la investigación, se le daba bastante lo de hongos bacterias era muy bueno, eso era lo que más le gustaba en otras ramas también se desarrollaba muy bien pero yo creo que ese era su favorita” narró su compañero Juan Carlos Martínez.

Además, era cofundador de una organización juvenil por la ecología y participaba en una brigada de apoyo a emprendedores. Para costear sus estudios universitarios, estudiaba y trabajaba comercializando algunos productos de piel que eran elaborados por su familia.

En su vida personal, el joven no tenía novia pero si una compañera que le gustaba mucho a la que con cariño llamaba “Chula” y que con frecuencia visitaba.

Sus compañeros lo definen como una persona sana y alejada de los vicios, ya que inclusive practicaba Basketball en las instalaciones de la universidad. 

De acuerdo a testimonios, fue al concluir su horario de clases que Ángel en compañía de otros amigos de su grupo optaron por reunirse en la “Barda” de la comunidad de “El Copal” en Irapuato, muchos de ellos no pudieron asistir por tener prácticas Basketball y otras actividades extracurriculares, fue al llegar a casa que a través de noticias y redes sociales se dieron cuenta de lo sucedido.


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