En condiciones favorables de salud, apareció Rafael Adrián Ibarra Negrete, de 29 años, a quien su esposa reportó como desaparecido, a través de redes sociales, desde el pasado viernes 29 de julio de este 2022.
De Ibarra ya no se supo nada cuando este regresaba a Gómez Palacio, luego que disfrutaba un periodo vacacional en Mazatlán, Sinaloa.
Su esposa, Lille Vázquez, informó a través de redes sociales que su esposo Rafael, ya había aparecido, pero no dio detalle.
Explicó a Milenio Laguna que fue durante la madrugada de este viernes, que recibió una llamada de un número desconocido. Nunca se imaginó que la voz de ese hombre que le hablaba, fuera la de esposo Rafael, quien le dijo que se había extraviado en la Sierra de Durango, luego que fuera perseguido por varios vehículos sospechosos.
Le pidió que se trasladara hasta el poblado de Cuencamé, justo donde se encontraba abordo de su vehículo el Fiat 2022, rojo con negro y aparentemente estaba escondido.
Los sentimientos de temor, angustia y miedo de Lille desaparecieron cuando escuchó la voz de Rafael.
Inmediatamente avisó a unos familiares y se trasladó hasta Cuencamé, a auxiliar su esposo, a quien lo encontró con pánico, triste y deprimido.
Aproximadamente antes de las 07:00 de la mañana, Rafael ya estaba resguardado por sus familiares.
Lille dijo que no avisó a las autoridades ministeriales de la Vicefiscalía General de Durango, ya que cuando fue interponer la denuncia correspondiente, por la desaparición de su esposo, estas no mostraron interés en el caso.
- Policía
Especificó que Rafael estaba un poco deshidratado y con algunos rasguños en los pies y pantorillas, cuyas lesiones leves fueron causadas por la maleza y terreno irregular, en el que camino su esposo.
Dijo que su marido, le explicó que regresaba a Gómez Palacio, abordo del Fiat y por la carretera libre a Durango. En el camino se percató que lo seguían varios vehículos sospechosos y este aceleró por varios kilómetros y logró perderse entre la sierra, donde se escondió por algunos días.
Le narró que se quedó sin gasolina y al celular se le había descargado la batería, por lo que no podía comunicarse con ella.
Comentó que caminó por la orilla de la carretera hasta que llegó a un poblado y pidió auxilio.
Ahí lo auxiliaron para luego recoger su carro, donde lo había dejado y proseguir hasta Cuencamé, justo donde ya no tuvo recurso para seguir hasta Gómez Palacio.
La afectada expuso, que fue un milagro que su esposo apareciera con bien y está muy agradecida con Dios.
Comentó que cabe la posibilidad que Rafael sea tratado con algún especialista en psicología, debido a que presenta una dura crisis emocional.
Señaló que a partir de este momento sus vidas cambiarán, con respecto a la seguridad por lo que consideran contratar un sistema de geolocalización para el automóvil, así como adquirir algunas aplicaciones de seguridad y localización en los celulares.
Agradeció profundamente a todos aquellos usuarios de las redes sociales que compartieron la publicación de la desaparición de su esposo.