La legislación ha avanzado en cuanto a la venta, distribución y consumo personal de la marihuana, de 2019 a la fecha en Puebla capital; hasta el momento, colectivos han tramitado 470 permisos para uso terapéutico, personal y recreativo, lo que generó un crecimiento del mercado, pero la demora en la creación de un marco legal y reglas comerciales orilla a los microempresarios de los derivados de esta planta a trabajar en la ilegalidad, poniendo en riesgo su libertad ya que podrían alcanzar una sanción punitiva física de hasta 25 años en prisión.
Aunque los industriales del ramo van avanzando a la legalidad, aún tiene sus limitantes ante la ausencia de leyes que abarquen las cantidades industriales.
“En el 2019 cuando la Suprema Corte establece que es inconstitucional negar el uso para fines lúdicos o recreativos del cannabis, existe la posibilidad de que cualquier ciudadano pueda utilizar hasta 5 gramos de esta yerba para uso personal, habrá quien lo use de manera científica, lúdica o recreativa” comentó el abogado Ricardo Fernández y añadió que ese año fue un primer paso importante para los consumidores e industriales del ramo.
El gran tema, según el litigante, es que los diputados y senadores no han hecho su trabajo, ya que tienen que emitir una ley reglamentaria, una que establezca las rutas por las cuales se puede explotar el uso comercial de esta planta.
Juliana, psicóloga y microempresaria que está en proceso de capacitación constante para ampliar la oferta de distintos derivados, compartió algunas de las complicaciones al intentar agregarle valor a la marihuana y generar un negocio redituable.
“El asunto de la cannabis es muy controvertido, esto es porque está muy estigmatizado y generalmente se antepone el interés político y económico, por ello el proceso de regulación en nuestro país va muy lento” afirmó la especialista.
Datos publicados por el Centro de Integración Juvenil en Puebla indican que la edad de inicio de uso de la marihuana en 2023, se redujo a jóvenes de 19 a 14 años de edad, siendo el sector de entre 15 y 19 los que más la consumen de manera recreativa.
Un tema controversial, frenado por poderes económicos, políticos, y que incluyen al narco, en el hipotético de su legalización, probablemente disminuirá su margen de ganancia al tener que pagar impuestos y generar obligaciones laborales.
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