En el primer bimestre del año, Puebla reportó una contracción en la producción de vehículos de 23.5 por ciento con relación a igual lapso de 2021, en medio de los estragos de la pandemia de Covid-19 y la escasez de semiconductores que afecta a la industria automotriz a nivel global.
Entre las plantas Audi y Volkswagen, con sede en Puebla, sumaron un total de 59 mil 651 vehículos armados en los meses de enero a febrero, en contraste a los 77 mil 966 registrados en igual lapso del año pasado.
Conforme al Registro Administrativo de la Industria Automotriz de Vehículos Ligeros, publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la planta Audi, ubicada en San José Chiapa, ensambló 31 mil 427 unidades en el primer bimestre de este año, cifra que representó un aumento de 84.6 por ciento con relación a las 17 mil 027 registradas el año pasado.
La planta de autos de lujo detuvo el 28 de enero y durante dos semanas, las actividades de producción en el segundo turno para evitar un repunte de contagios de coronavirus entre el personal dedicado al modelo Q5.
Aún así, en febrero sumó 13 mil 963 unidades armadas, un repunte de 24.7 por ciento con relación a igual mes del año pasado.
En contraste, la planta Volkswagen reportó una producción acumulada de 28 mil 224 unidades de los modelos Jetta, Taos y Tiguan en los dos primeros meses de 2022, lo que significó una reducción de 53.7 por ciento frente a los 60 mil 939 autos armados en igual bimestre del año anterior.
La planta que se localiza en el municipio de Cuautlancingo, mantuvo durante enero y febrero paros intermitentes en sus diferentes líneas de producción por falta de semiconductores.
AGA