No es necesario viajar hasta el lejano oriente para disfrutar un poco de la cultura china, ya que en el Centro Histórico de la Ciudad de México se encuentra el barrio chino, que a pesar de ser considerado el más pequeño del mundo, ofrece comida, tradiciones y actividades propias del ‘gigante asiático’.
Ubicado en la calle Dolores, a un costado de la Alameda Central, en este barrio fue inaugurado en la década de los sesentas, si eres fanático de la cultura china o simplemente te da curiosidad visitar este lugar, te contamos su historia que se remonta desde el siglo pasado.
Origen del barrio chino de la CdMx
Durante la segunda mitad del siglo XIX, hubo otra oleada de inmigración china a nuestro país por considerarse una mano de obra eficiente y barata. Inclusive hacia 1874 el gobierno mexicano tuvo una iniciativa para promover una relación oficial con China y enviar una delegación a dicho país, pero el Barrio Chino del Centro Histórico surgió hasta después de la Revolución, aunque los censos señalan que ya desde 1900 había 125 chinos en las calles de Dolores; y para 1910, ya eran mil 400.
De acuerdo con el texto El Barrio Chino de la Ciudad de México: pasado y presente de Constanza Ontiveros Valdés, doctora en historia por la Universidad Nacional Autónoma de México, otra de las motivaciones que impulsó el desarrollo del Barrio Chino capitalino es que durante este periodo la comunidad china radicada principalmente en el norte del país se dispersaron a otras partes del país.
Asimismo, el surgimiento de este barrio también se vincula directamente con el establecimiento, en 1946, de uno de los primeros grandes restaurantes chinos de la ciudad llamado Shangai, el cual fue el parteaguas que trajo la atención hacia comida como los panes al vapor, los helados, los bisquets, el arroz frito y los rollos primavera.
Este auge hizo que a finales de los años cincuenta se creara una Asociación Cultural China, con la intención de mostrar a los mexicanos su cultura, yapara la década de los 70 el barrio chino está consolidado.
Entre 2006 y 2008 se hicieron varias remodelaciones a la zona con ayuda del gobierno de la ciudad. Una de ellas fue la construcción del Arco Chino o Pagoda, una estructura colocada en la calle Independencia, que fue construido con material de acero reforzado con cerámica, granito y mármol.
En 2018 el barrio chino sufrió de una nueva remodelación que incluyó un nuevo corredor, luminarias, pisos, jardineras o la rehabilitación del parque Santos Degollado.
En esta zona continúan viviendo inmigrantes chinos y también coreanos, indonesios y filipinos que forman parte de este vecindario y actualmente cada llegada del año nuevo chino es celebrada con actividades propias de la cultura china, las cuales incluyen bailes y actividades marciales.
¿Qué hacer en el barrio chino?
1- Disfrutar de comida china.
Como no podía faltar, la comida china es variada en la calle de Dolores, podrás optar de entre varios establecimientos, como el Hong King, que es el restaurante más antiguo en operación del Barrio Chino.
Su menú permite ordenar platillos en solitario, pero te recomendamos pedir un paquete para 2 personas con arroz frito y varios guisados, para que puedas “picar” de todo.
2- Pan de vapor
Pero si sólo tienes antojo, podrás comprar un pan al vapor, llamados boazi, un panecillo tradicional chino de colores muy llamativos. Están rellenos con todo tipo de sabores dulces, pero también hay versiones con carne o vegetariana; sin embargo, los tradicionales llevaan frijoles dulces o carne agridulce.
3- Tiendas de productos, alimentos y recuerdos.
En el barrio chino no sólo encontrarás comida, también diversos establecimientos donde será imposible salir con las manos vacías, ya que hay tiendas de recuerditos y decoración, como Asia Shop, donde encuentran amuletos hasta el típico gato de la suerte.
Lo interesante radica en su oferta de alimentos, ingredientes y condimentos chinos, hasta los dulces llamarán tu atención.
lvm