Blanca Paredes, abogada y ex pareja del ex magistrado Covarrubias, lleva 36 horas sin ingerir ningún alimento y sin permitirle el acceso al pórtico, hasta la tarde de esta viernes las autoridades de Casa Jalisco no se han acercado con ella.
La abogada continúa su segunda huelga de hambre que evidencia la violencia institucional, falta de sensibilidad y el hartazgo a la falta de justicia en el estado.
- Policía
“Ni las luces así como lo decíamos ni las luces prendieron y ni las luces de las autoridades, así es 72 horas la vez pasada, ahora ya va a la mitad y yo no veo ni sus luces, el problema es que ahora ya no quiero una promesa ahora necesito que se accione, que se cumpla con lo que se prometió”, comentó Blanca.
En esta ocasión, Blanca apuntó que viene más fuerte que la vez pasada y las autoridades lo saben, por lo cual no se moverá tan fácilmente y seguirá evidenciando el mal actuar de las autoridades si a eso quieren llegar, pues ya no le teme a nada, aun sabiendo que lo que está haciendo pone en riesgo su salud, reiterando que es lamentable a lo que debe llegar uno para ser escuchada.
Adelantó que por la tarde noche de este viernes, una vez que arriben más integrantes de distintos colectivos que la acompañan, realizarán una dinámica ilustrativa dirigida hacia las autoridades ante la impunidad e indolencia de la entidad a todas las problemáticas que le aquejan y les han fallado.
“Donde se va a poner el nombre de la persona con un plumón y plasmar la mano ya sea con tinta roja o con sangre para ser una muestra del dolor que causan al final de cuentas no tenemos paz las víctimas o quien ha perdido un ser querido no tiene paz, sufrimos, ósea a las personas que estamos inmiscuidas en violencia institucional, sexual, psicológica, económica, vicaria, imagínese ahora a las personas que tienen a sus seres queridos desaparecidos, las personas que luchan en contra de esas arbitrariedades, a esos impuestos excesivos, veamos aquí las vallas esto se mantiene”, comentó.
Reiteró que cualquier lucha será bienvenida, a fin de evidenciar una parte de todas esas víctimas que han sido revictimizadas y se les han cerrados las puertas del gobierno estatal.