Lorena Hernández y Marisol son madre y tía, respectivamente, de dos menores de edad que fueron abusadas sexualmente. Por lo que ambas asistieron a la marcha feminista que comenzó en el Parque Rojo, en Guadalajara, para exigir que los responsables de este delito sean encarcelados.
“Yo quiero justicia porque mi hija es menor de edad y fue violada”, expresó Lorena.
Janeth, la hija de Lorena, tiene 16 años de edad, cuenta con lágrimas que fue con su mamá a realizar una denuncia en Ciudad Niñez.
“La autoridad me ha juzgado, que porque yo no me defendí por mi altura o como estoy físicamente, porque no me defendí de una persona de 22 años. Eso es demasiado injusto y siento impotencia de que no se haga nada, y ahorita que él esté libre por las calles y que no se haga justicia”, explicó Janeth.
Por lo anterior, Lorena y su hija optaron por participar en la manifestación del 8M para visibilizar el ineficaz acceso a la justicia por los delitos en razón de género. Ambas exigen al gobierno de Jalisco que mejoren los procesos jurídicos para garantizar que los agresores sean encarcelados.
“Es muy tedioso, todo el día tener que pasar por una demanda, todo el día tener que llevármela y yo soy madre y padre a la vez, y tener que trabajar. Ellos trabajan nomás de lunes a viernes, y los sábados y los domingos qué. Y muchos estudios que les hacen para poder llegar dizque a la verdad”, detalló Lorena.
Marisol también participó en la marcha para alzar la voz por su sobrina de nueve años, quien fue violada en 2020, y a pesar de que realizó una denuncia y que existe evidencia del hecho, hasta el momento no se ha comenzado una investigación.
“Mucho papeleo, mucho esperar, y él amenaza con escapar y de aquí a que transcurre el papeleo y todo eso, pues” comentó Marisol.
De acuerdo a lo que cuenta, Marisol afirma sentirse frustrada y preocupada de que el gobierno de Jalisco no haga investigaciones, así como tampoco persiga los delitos contra las menores de edad.
“Queremos que pague, que esté en las rejas para que no le pasa nada a nadie más”, exigió Marisol.
Luego de que no se ha visto rastro de justicia, estas mujeres perdieron el miedo y salieron a las calles a exhibir fotografías de sus agresores. Saben que la autoridad no los busca ni los investiga, por lo que su única alternativa fue dejar a un lado el silencio y mostrar los rostros de los responsables que violaron a las menores.
AA