Es común que algunos cabellos se caigan diariamente, alrededor de 100 para ser más precisos, sin embargo, hay quienes tienen una caída en exceso, lo que va convirtiéndose en un problema más severo como la calvicie.
Todo tipo de cabello tiene un ciclo capilar, en donde nuevos nacen y otros se caen, pero hay factores que lo alteran y favorecen la caída, por ejemplo, la mala alimentación, el estrés, o en el caso de las mujeres los cambios hormonales.
Pero hay una manera de prevenirlo, aunque hay demasiados tipos de cabello y cada uno tiene sus características, la clave esta en cuidarlo y tener información sobre el tema y de alguna manera saber de los síntomas para en caso de ser necesario visitar al dermatólogo y así tener un tratamiento preciso y no hacer caso a los mitos populares sobre la calvicie.
Cómo prevenir la calvicie
Para poder prevenir la calvicie, aquí te dejamos algunos tips que especialistas en el tema recomiendan y pueden ayudar tanto a hombres, como mujeres.
Higiene capilar: Se recomienda lavar el cabello con shampoo de calidad y con brinden a tu cabello lo que necesita, para lavarlo se aconseja que sea de manera delicada y evitar caer en los hábitos que solo lo dañan.
Evita desenredar el cabello húmedo: Antes de lavar el cabello cepíllalo para deshacerte de los nudos, pues el pelo húmedo es más débil y provoca su quiebre con mayor facilidad.
No tallar el cuero cabelludo con los dedos constantemente: A la hora de lavar el cabello de esta manera lo único que se logra es irritar la piel capilar, para hacerlo de manera correcta se debe repartir el champú suavemente y frotar con las palmas de las manos durante 3 o 4 minutos, luego masajear las puntas. Es recomendable ir mojando el cabello para que se forme espuma, esto hace que el frotamiento no sea tan agresivo.
No enjuagar el cabello con agua caliente: Para esto se recomienda que se use agua fría, pues el agua caliente debilita el cabello.
Tener productos que aporten al cuidado del cabello: Como acondicionadores, lociones para fortalecer el pelo.
Tener una dieta equilibrada: Teniendo buenos hábitos de alimentación, se logra obtener los nutrientes necesarios para tener un cabello sano.
Cepillar el cabello: Esto estimula la circulación sanguínea del cuero cabelludo gracias al masaje que realizamos con las púas del cepillo.
No abusar del calor en el cabello: Utilizar con moderación los secadores y planchas de pelo.
Si presentas exceso de caspa, grasa o comezón en el cuero cabelludo, es necesario poner atención en tratamientos de higiene y así evitar que se caiga de manera excesiva el cabello.