Descubre el histórico Canal de la Perla, una joya arquitectónica que serpentea bajo el corazón de Torreón.
Este antiguo sistema de riego, que atraviesa las emblemáticas avenidas Morelos, Juárez e Hidalgo, fue hallado de manera fortuita en 2003, convirtiéndose desde entonces en uno de los tesoros más cautivadores de la ciudad.
A pocos pasos de la Plaza de Armas, esta reliquia del pasado invita a locales y turistas a sumergirse en un fascinante viaje subterráneo.
Durante 40 minutos, los visitantes pueden adentrarse en sus túneles, donde la historia cobra vida en una experiencia que fusiona el patrimonio cultural con la emoción del descubrimiento.
Dicho lugar turístico cuenta con tres entradas para poder adentrarte en las profundidades de los túneles que te ofrece este sitio, las cuales están en las siguientes ubicaciones:
- En medio de la explanada de la calle Cepeda entre Juárez e Hidalgo justo a un lado del Museo Arocena
- En la calle Valdés Carrillo y avenida Juárez en la Plaza de Armas de Torreón
- En la intersección de la calle Zaragoza y avenida Morelos a un costado de un conocido banco
Cuántos metros mide el Canal de la Perla en Torreón
Con una extensión total de hasta mil 200 metros que cruzan por Torreón, y que siguen a cielo abierto 11 kilómetros, en 1904 el canal fue embovedado de manera poco firme, lo que motivó que los dueños de las edificaciones que se encontraban sobre él, reforzaran de acuerdo a sus necesidades de construcción.
En la actualidad y gracias a la restauración después de que fue descubierto, es posible recorrer bajo la ciudad 570 metros libres del Canal de la Perla, donde se pueden apreciar la bóveda y los grandes ladrillos con los que fue construido.
Se conoce que la bóveda más antigua se erigió a principios de 1900 y que los edificios sobre la superficie eran el Banco Chino, el Casino de la Laguna y el Banco de La Laguna.
El Canal fue redescubierto en el 2003
Mientras corría el año del 2003 el canal fue redescubierto. Dicha situación ocurrió de manera fortuita en 2003 durante unas obras de construcción en el centro de la ciudad.
En aquel momento, se realizaban trabajos de remodelación para modernizar la Plaza de Armas y las áreas circundantes. Al excavar en una de las calles cercanas, los trabajadores encontraron parte de una estructura subterránea que, al examinarse más detenidamente, resultó ser el antiguo canal de irrigación que había sido olvidado por décadas.
Tras su redescubrimiento, el Canal de la Perla fue restaurado y adaptado como un sitio de interés histórico y cultural. Hoy en día, una parte del canal ha sido habilitada como un corredor peatonal subterráneo que se extiende bajo algunas de las principales calles del centro de Torreón.
El canal cuenta con iluminación, exposiciones artísticas y eventos culturales que lo han convertido en un atractivo turístico.