La Dirección de Ecología y Medio Ambiente recibió un reporte de un caballo herido, luego de ser atropellado por un vehículo todo terreno, mejor conocido como “racer”, en el área natural protegida Cañón de Fernández.
El accidente tuvo lugar el día anterior, por la tarde, cuando policías ecológicos del parque fueron alertados de la situación alrededor de las 20:00 horas. El animal, que había sido embestido, sufría de fracturas severas en todas sus patas y en la cerviz, lo que lamentablemente resultó en su fallecimiento.
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Vehículos todo terreno están prohibidos en el Cañón de Fernández
Ricardo Díaz Segovia, responsable de la dirección de Ecología, reiteró enfáticamente que la entrada de vehículos todo terreno está estrictamente prohibida en esta área natural protegida.
Esta medida busca preservar no solo la integridad de los ecosistemas frágiles presentes en el cañón, sino también proteger a la diversa fauna que depende de estos espacios para su supervivencia.
El Cañón de Fernández, a pesar de ser un área bajo protección federal, cuenta con un operativo de vigilancia implementado por el Gobierno de Lerdo. Este operativo abarca los 153 kilómetros del Río Nazas, un hábitat vital para numerosas especies locales.
Díaz Segovia hizo un llamado enérgico a la ciudadanía para que tome conciencia del impacto ambiental negativo que pueden causar las acciones irresponsables, como el ingreso ilegal de vehículos y otras actividades que perturban el equilibrio natural.
El incidente ocurrido el pasado lunes en el área natural protegida del Cañón de Fernández ha resaltado una vez más la importancia de la conservación ambiental y el respeto hacia la vida silvestre.
Este trágico suceso resalta las consecuencias directas del incumplimiento de las normativas establecidas para la protección del ecosistema del Cañón de Fernández.
¿Cuáles son las medidas cruciales para proteger el Cañón de Fernández?
Entre las recomendaciones clave emitidas para garantizar la seguridad de los visitantes y la preservación del entorno natural se encuentran:
- Evitar ingresar al río debido a las peligrosas corrientes que pueden arrastrar a las personas.
- Abstenerse de encender fogatas, ya que esto puede desencadenar incendios catastróficos en la región.
- Respetar tanto la flora como la fauna del lugar, siguiendo las indicaciones proporcionadas por las autoridades locales y la policía ecológica.
Este incidente trágico subraya la necesidad urgente de una mayor concienciación y cumplimiento de las normativas ambientales.
Solo a través de un compromiso conjunto de todos los ciudadanos, autoridades y visitantes, se puede garantizar la protección a largo plazo de los espacios naturales como el Cañón de Fernández, asegurando que continúen siendo refugios seguros y saludables para la vida silvestre y un recurso invaluable para las generaciones futuras.
YSL