De un total de 48 centros de rehabilitación o anexos que se tienen registrados en La Laguna, durante 2023 fueron verificados 26 de estos establecimientos, de los cuales en siete se han aplicado medidas de seguridad (clausura) y en seis más sanciones administrativas.
Para vigilar su funcionamiento, de manera periódica son verificados por las autoridades del área de Regulación y Fomento Sanitario de la Jurisdicción Sanitaria Número VI en Torreón, así como por la Subsecretaría de Protección Civil del Estado de Coahuila.
José Luna Riojas, coordinador del área de Regulación y Fomento Sanitario de la Jurisdicción Sanitaria Número VI, señaló que cuando se aplica una medida de seguridad, se debe al incumplimiento de los requisitos para su funcionamiento.
“Cuando es una medida de seguridad, esta se toma en la primer visita regularmente y es porque no cuenta con expedientes clínicos, personal que se encuentra ahí no está capacitado, las instalaciones no cumplen, hay sobreexplotación, los baños están en malas condiciones o la cocina esté en pésimas condiciones; eso nos orilla a tomar una medida de seguridad que regularmente es suspender actividades”.
Indica que se tiene que ser muy cuidadoso en una suspensión de actividades en este tipo de establecimientos, debido a que no es igual que cerrar un restaurante u otro negocio, pues en estos casos se tiene que ver qué es lo que se va hacer con los pacientes.
Las sanciones, dijo, se aplican por incumplimiento mismas que al no dársele la atención en un tiempo determinado, se puede proceder a una medida de seguridad y una sanción administrativa.
Anexos clandestinos
Muchas de las irregularidades que se detectan en estos centros de rehabilitación son denunciadas por los familiares de los usuarios, las cuales se hacen tanto en el área de regulación sanitaria, así como en otras dependencias municipales como Salud Municipal o bien en la Fiscalía General de Justicia, dependiendo sea el caso.
Manifiesta que muchos de los casos en los que se han detectado estos anexos clandestinos, son los propios ciudadanos y familiares de los pacientes los que lo denuncian, por lo que resaltó la importancia de que antes de un internamiento se verifique si estos establecimientos cumplen con los permisos necesarios.
Explica que existen dos tipos de centros de rehabilitación: uno de ellos son los modelos mixtos, que son los anexos en donde las personas ingresan por tiempos indefinidos y los modelos de ayuda mixta que son utilizados principalmente por los Alcohólicos Anónimos (AA) en los que solo se acude a sesiones, los cuales también deben ser verificados.
Dio a conocer que en estos establecimientos se supervisan de acuerdo a la Ley General de Salud que se complementa con varias normas oficiales mexicanas, entre ellas los procedimientos que se llevan a cabo en la admisión, estancia y egreso de los pacientes, así como las condiciones físico-sanitarias y los protocolos de atención a la misma.
“Algunas son para las condiciones físico -sanitarias, esto quiere decir que por determinadas personas que se encuentren internadas, debe contar con determinado número de baños, habitaciones las cuales no pueden estar sobrepobladas, así como las bitácoras de mantenimiento del aseo de las instalaciones”.
De igual manera, se verifica la plantilla de recursos humanos con los que se cuenta, con la intención de que se brinde una atención integral por parte del personal multidisciplinario, en este caso médicos generales, especialistas, trabajadores sociales, psicólogos y en determinado momento psiquiatras.
Es importante que el personal y psicólogos estén debidamente acreditados y capacitados para poder dar terapias a las personas que se encuentran en estos lugares. Asimismo, si existen algunos desechos biológicos infecciosos se tiene que llevar a la empresa encargada de su recolección y confinamiento.
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Uno de los requisitos con el que deben cumplir los anexos, es estar debidamente certificado por la Comisión Nacional Contra las Adicciones, contar con el aviso de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), tener un registro de todas las personas que hablan para sacar cita para el caso de información para internamiento y cumplir con los requisitos de Protección Civil, seguro a terceros dentro de la institución y certificado de fumigación.
Deben cumplir con el modelo de trabajo para cada usuario, así como el plan alimenticio de la semana, además de que se le pide a los familiares de los pacientes reciban terapia psicológica.
Es importante que las personas antes de internar a su familiar, llamen a la línea de la vida o verifiquen los registros de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (Conasama) para que conozcan las instituciones especializadas con certificación.
Sgg.