El Coro Gay de la Ciudad de México es una agrupación que surgió el 13 de junio de 2013 y el cual se ha ido transformando con el paso del tiempo con el propósito de visibilizar a la comunidad LGBT+ y retratar temas que incomodan, como la sexualidad.
Con música, colores y conceptos sobre diversas temáticas, las aproximadamente 100 voces que conforman la actualidad al Coro Gay de la Ciudad de México, presentan nuevas propuestas escénicas.
Ahora, “ha cambiado mucho el concepto, sobre todo con nuestro recién director musical que lleva poco más de un año, el maestro Enrique Dunn. Antiguamente, aunque nuestras presentaciones tenían una temática, como tal no tenían un concepto, lo que ahora sí”, explicó Oscar Urtusástegui, director ejecutivo, coordinador musical e integrante del Coro Gay de la Ciudad de México.
De esta manera, el coro ha presentado dos nuevas propuestas escénicas: Espíritus de luz, que se adentra en las partes luminosas y oscuras de nuestras vidas, pero también de cómo nos estigmatizan por nuestros cuerpos.
La segunda fue Raíces, donde se habló de desapariciones, secuestros y prostitución infantil, lo que Urtusástegui describe como “un espectáculo muy fuerte”.
Presentarán espectáculo que hablará sobre VIH
Además, adelantó, el 19 y 20 de diciembre “vamos a presentar en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, Nubes malva, que hablará sobre VIH y todos los estigmas que hay alrededor de ello, y que no es tan terrible como la gente piensa”.
“Todo esto ahora enmarcado con puestas en escena mucho más poderosas, con un equipo que va de un coreógrafo, director de escena, iluminador, escenógrafo, lo que ha sido uno de los grandes cambios que hemos tenido”.
Coro visibiliza a la comunidad LGBT
Para la agrupación, hablar de la diversidad no solo es situarse en junio, es hacerlo todo el año y a través de sus diversas fechas. Por ejemplo, el pasado 8 de octubre se conmemoró el Día Internacional de las Lesbianas, y el próximo 21 de octubre, el Día de Acción por la Despatologización de las Personas Trans, que visibiliza y cuestiona la demanda de las prácticas que consideran a la diversidad (sexual, corporal y de género) como anomalía, trastorno o enfermedad.
Para adentrarse en las temáticas, “se habla con los coristas para que todos estemos informados. Hay una preparación muy grande; por ejemplo, para el espectáculo de Nubes malva, tenemos el apoyo de la Clínica Especializada Condesa, uno de los santuarios más importantes de VIH en el mundo que, durante nuestros ensayos, hemos tenido pláticas de cómo se vive con VIH; ahorita vamos a tener una conversación sobre el uso de sustancias, y bueno, cada domingo implementamos estas pláticas para facilitar y transmitir al público esa información.
¿Qué se necesita para formar parte del Coro Gay?
El requisito es que sean mayores de edad y se hace una audición artística, donde se les pide que manden una canción cantando, y otro video donde nos comenten por qué quieren pertenecer a una agrupación de esta naturaleza; después de eso hay un panel de personas que hacemos la parte de ver las características y hacen una audición presencial donde Enrique Dunn decide quienes quedan, pero está abierto para todas, todos, todes, incluso para personas heterosexuales porque uno de nuestros principios es que estamos luchando porque no nos discriminen y cómo podríamos nosotros discriminar a alguien por su preferencia sexual.
La sexualidad, un tema que sigue incomodando
La persona más joven del coro tiene 20 años y la mayor 63, así que hay una gran diversidad de tallas, de edades, de profesiones, lo que también es importante. La representación es importante porque luego se nos acerca gente y nos dice que quiere pertenecer a un grupo como nosotros; en mi caso, que no soy pequeño ni delgado, dicen: ‘mira, también puedo estar allá arriba (del escenario)’.
Los retos son seguir abriendo espacios. Cuando nos preguntan por qué nos llamamos así, es porque la palabra gay sigue haciendo mucho ruido para mucha gente, y en el momento que deje de hacer ruido es cuando lo quitaremos de nuestro nombre; lo bonito de este proyecto es que la música mueve, y mueve a toda gente. México es un país muy musical y se deja llevar por lo que escucha, ve y siente.
Es importante hablar de diversos temas, y la gente y nosotros tenemos que aprender y estar abiertos a estas formas de pensar, y no nada más que sigamos viviendo o representándonos en un ghetto: que podamos estar en todos los escenarios y que la gente pueda ver y aprender. Somos equipos enormes los que estamos enfrente y detrás de estos espectáculos y definitivamente hay que seguir llevando nuestro mensaje que es igualdad, respeto, tolerancia y diversidad.
La parte sexual es una parte tan pequeña que está reservada normalmente para nuestra intimidad y para la intimidad de todas las personas, no importando el género. En la diversidad hay muchísima riqueza, y en la diversidad sexual también. "Somos afortunades que estar en un grupo con tanta riqueza".
ZNR