Víctor Antonio Ibarra, esposo de María Guadalupe Marina, relata el calvario que vivió este matrimonio desde las 7 de la noche del jueves 09 de febrero.
Al acudir al Hospital General de la ciudad de Torreón en labor de parto no pudieron recibir la atención médica de emergencia que necesitaban debido a que no se contaba con un ginecólogo en turno, por lo que ellos, junto con alrededor de otras 8 mujeres fueron mandados al Hospital General de Matamoros para ver si allá podían ser recibidos, pero en la vecina ciudad no cuentan con especialistas, sólo médicos generales.
"Pues no nos querían atender que no tenían ginecólogos y teníamos desde las 7 de la tarde, de plano no nos atendieron nos mandaron a Matamoros que allá había ginecólogo, y luego ya del Hospital General de Matamoros nos mandaron al Hospital del Manto y de plano no nos quisieron atender y pues ahorita estamos aquí en el Universitario pues de urgencia pues a dónde corremos "
Víctor comentó que tiene servicio en el Instituto Mexicano del Seguro Social pero debido a que supuestamente por una negligencia médica en un parto anterior falleció su bebé, decidió no llevar a su esposa allá, por lo que desesperado acudió al Hospital Universitario la madrugada del viernes con el costo económico que ello conlleva.
"Por eso ya no nos quisimos atender en el Seguro Social porque pues ya perdimos un bebé y ya no queríamos pasar lo mismo, por eso acudimos al Hospital General, pero pues salió la misma y ahorita estamos aquí en el Universitario echándole las ganas del mundo que todo salga bien"
El padre de familia hizo un llamado a las autoridades debido a que no todos cuentan con los recursos económicos para la atención médica particular y en un hospital tan grande e importante como lo es el General no se pueden tener esas carencias, comentó que así como su esposa María Guadalupe, otras 3 mujeres decidieron ir al Hospital Universitario.