Las calles de Guanajuato capital se llenaron de música, color y folklore pues como cada año, miles de personas salieron para presenciar el tradicional desfile conmemorativo de la Toma de la Alhóndiga.
En este 213 aniversario, el gobierno del estado y sus municipios echaron la casa por la ventana, pues por primera vez el gobernador se integró al desfile, a bordo de su caballo y con el atuendo típico de charro, para cabalgar hasta la Alhóndiga de Granaditas y encabezar la ceremonia del Fuego Simbólico.
Previo a ello, desde la zona de “Embajadoras” el desfile dio inició encabezado por Diego Sinhue Rodríguez Vallejo recorriendo a pie las calles de la capital, acompañado por su gabinete.
Además, desfilaron también las distintas dependencias y organismos autónomos de la entidad, sin embargo, el toque de alegría y color se lo dieron los 46 municipios del estado, ya que cada uno de ellos envió una comitiva para desfilar mostrando lo que más los caracteriza.
Un ejemplo de ello es el municipio de Moroleón, quienes llevaron ropa que regalaban a los asistentes a su paso, ya que en la industria textil es lo que les da identidad.
El desfile concluyó con la ceremonia cívica en las instalaciones de la Alhóndiga de Granaditas, misma que ocurre en el marco de las celebraciones por los 200 años de Guanajuato como Entidad Federativa, Libre y Soberana. Misma donde el gobernador llamó a la unidad ante la adversidad.
"Somos guanajuatenses, gente que se crece ante las adversidades; con ideales de libertad, de justicia y democracia, que han marcado la historia de México”
“En Guanajuato arde la llama de la educación y de la innovación en nuestras escuelas, en nuestras universidades, en nuestros centros de investigación, en nuestras empresas. Hoy le decimos a México y al mundo que en Guanajuato sigue encendido el fuego de la libertad y de la democracia; de la justicia y de la participación” dijo el Gobernador.
En esta fecha, se recuerda también la valentía de Juan José de Los Reyes Martínez Amaro “El Pípila”, quien con una piedra laja cargada en la espalda incendió el acceso la Alhóndiga y permitió el ingreso del Ejército Insurgente y la derrota del Intendente Juan Antonio Riaño y sus 600 hombres armados.