Luego que fuera buscados por una escuela de nivel superior y comercios en la ciudad de Durango por una nota de Juan Diego Cardoza, un maestro que busca estudiar la maestría y que para costearse la vida y los estudios, vende conos rellenos con cajeta. Una universidad le extendió una beca, y este fin de semana, regresó a la escuela.
Juan dio a conocer que después que apareciera la nota, comenzó a aumentar la venta de sus productos. Y días después, fue contactado no solamente por la escuela que le ofreció la beca, sino también por un negocio de tacos donde podrá vender sus conos.
“Comenzaron a suceder cosas muy positivas desde ese momento. Noté que empezó a subir la venta aquí. Y tiempo después fue cuando recibí la llamada de los directivos de Avanza quienes me ofrecieron cursa la maestría con ellos, ofreciéndome una beca, que cubre el 100 por ciento de lo que fue la inscripción, los módulos y lo que será titulación una vez que se termine”.
Expuso que ya después de sus primeras clases el fin de semana, considera como una buena racha de suerte, porque desea comenzar con la innovación al impartir cátedra, y que los alumnos aprendan mejor.
“Fue uno de los puntos por los que accedí a la maestría, la innovación educativa, porque es algo que va a reforzar muchísimo mi preparación como docente y en el momento que obtenga mi plaza y esté frente a grupo me va a servir bastante”.
Aseveró, además, que ahora puede invertir el dinero de la venta en materiales para clase, así como para los viajes que tenga que hacer al interior del estado para impartir sus conocimientos a los alumnos de primaria.
“Del tiempo que estuve en la carrera, y los años que estuve con los conos, nunca me imaginé que pasara algo así. Fue algo que me sorprendió muchísimo, se han derivado muchas cosas que me han motivado a superarme constantemente”.