Luego de ocho horas de trabajo para controlar una fuga clandestina de gas en un ducto de Pemex en Nextlalpan, Estado de México, bomberos llevaron a cabo la quema controlada de combustible a fin de que se consuma el remanente que quedó en la tubería.
Vecinos de la zona informaron a las autoridades alrededor del mediodía sobre una fuga de gas LP en el ducto Cactus-Tula-Zapotlanejo, en el tramo Venta de Carpio Santa Ana Nueva, de la que emanaba combustible tras la perforación del ducto por parte de presuntos huachicoleros.
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Al lugar arribaron elementos de Personal de Protección Civil del Estado de México, Guardia Nacional, Ejército mexicano, policía estatal y de seguridad de Petróleos Mexicanos (Pemex), donde impulsaron montaron un puesto de control del siniestro y custodia del lugar.
El equipo de Pemex detalló que se cerraron las válvulas del ducto y se llevó a cabo la quema del combustible a fin de que este se consuma. El fuego alcanzó los 20 metros de altura, con una columna de humo negro.
Se contempla que el día de mañana Pemex realice el taponeo de la fuga, así como la revisión de toda la tubería a fin de descartar fugas en algún otro punto.
La zona permanece vigilada por el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y personal de Petróleos Mexicanos.
El robo de combustible no es un acontecimiento nuevo, se trata de un problema social y económico que ha dejado afectaciones a México, sin embargo, fue hasta el 2018, cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador inició una estrategia para combatir el robo de combustibles y trajo el tema a la mesa.
El huachicol, robo de combustible, también se volvió un tema de interés público cuando 18 de enero de 2019 se localizó una toma clandestina en Tlahuelilpan, Hidalgo, la cual provocó una explosión donde más de 100 personas perdieron la vida.
PGG