Desde temprana hora, cientos de personas acudieron a las zonas arqueológicas de Cacaxtla y Xochitécatl en el estado de Tlaxcala para formar parte del Equinoccio de primavera 2022, en donde realizaron rituales para cargarse de energía.
La mayor actividad ocurrió al mediodía, aunque no se permitió el ingreso a la Pirámide de las Flores y la de Espiral.
Algunos de ellos vestidos de blanco, con huaraches, llamativos collares y con flores blancas en las manos, se dieron cita en esos antiguos centros prehispánicos para levantar las manos hacia el cielo e implorar que “la energía del sol” les ayudará para sentirse positivos y con nuevas actitudes en lo que resta del año.
Vale recordar que este año, el cambio de estación se registró el pasado 20 de marzo, a las 9:33 horas, lo cual no fue factor para que los creyentes de esta práctica se presentaran este lunes para cumplir con su ritual.
El espíritu del equinoccio
En los calendarios de las diversas culturas prehispánicas de Mesoamérica, el equinoccio de primavera era más que un cambio de estación, pues era de vital importancia en los ciclos agrícolas y para la planeación de la siembra.
Para los pueblos prehispánicos el equinoccio de primavera se relacionaba con el renacimiento porque marcaba el inicio de la temporada de crecimiento de las plantas, mientras que el de otoño indicaba el momento de la cosecha.
Los equinoccios ocurren dos veces al año y se caracterizan porque el día y la noche tienen la misma duración. Este fenómeno tiene lugar cuando el sol se encuentra situado en el plano del ecuador celeste, es decir, alcanza el cenit. Esto se da porque el paralelo de declinación del Sol y el ecuador celeste entonces coinciden.
Basados en este dato, desde hace unos años a la fecha, algunas personas empezaron a celebrar este evento astronómico, el cual tiene lugar en primavera y otoño. Desde entonces ha estado relacionado con rituales y mitos.
Algunas personas aseguran que cada año en el cambio de estaciones usan a las pirámides como antenas, pues esos espacios son los responsables de canalizar la energía.
Atraen la energía positiva
En el Linaje de las Flores, es decir, Xochitécatl, los visitantes subieron a la pirámide de las Flores. En su cima la gente se tomó fotos extendió los brazos al cielo o las manos al frente para recibir esa fuerza de la naturaleza.
El personal que ahí labora informó que el costo del boleto para ingresar a Cacaxtla es de 85 pesos por persona, pero con ese mismo boleto podían ingresar a Xochitécatl, mientras que los niños menores de 11 años, adultos mayores, profesores, estudiantes y discapacitados entraron gratis.
Estimaron que el pasado domingo ingresaron cerca de mil 500 personas y hasta el mediodía de este lunes, poco más de 700 visitantes.
¿Qué podemos encontrar en la zona arqueológica?
La zona arqueológica de Cacaxtla-Xochitécatl se localiza en la población de San Miguel del Milagro, a unos 19 kilómetros al suroeste de la capital del estado de Tlaxcala, en el municipio de Nativitas.
Situada frente al cerro Xochitécatl, más bajo, Cacaxtla combina características de un centro ceremonial, sitio de habitación de la élite y de fortificación, ya que la ciudadela estuvo rodeada de fosos defensivos, además de murallas de tierra para su protección.
El sitio incluye dos pequeñas pirámides sobre las que se edificaron adoratorios. Una de las características de Cacaxtla es que varias de sus construcciones poseen un pórtico al frente, seguido de un pequeño recinto en la parte posterior.
Mientras que la zona arqueológica de Xochitécatl está conformada por cuatro pirámides o basamentos: pirámide de las Flores, edificio de la Serpiente, La Espiral y el Basamento de los Volcanes.
A las 18:00 horas, culminó el Operativo Equinoccio Primavera 2022 impulsado por la Secretaría de Cultura federal y el INAH a nivel nacional y, por tanto, en el resto de las zonas arqueológicas del estado de Tlaxcala, como Tizatlán y Tecoaque.
Cabe resaltar que este año, el operativo estuvo dedicado a la memoria del arqueoastrónomo Pedro Francisco Sánchez Nava, fallecido el pasado 22 de febrero.
IGO