Luego de que se presentara el primer caso positivo de covid-19 en Nuevo León, el 29 de junio de 2020, de adicionó en el Código Penal del Estado el delito de “peligro de contagio”, el cual acumula, nueve casos en la entidad.
De acuerdo al Artículo 337 bis del citado Código, si una persona tiene conocimiento de que padece alguna enfermedad grave y transmisible y aun así dolosamente ponga la salud de otro en “peligro de contagio”, se aplicarán de tres meses a tres años de prisión y una multa de 100 a 400 cuotas.
Y si se trata de una enfermedad incurable o que cause daño grave permanente, la sanción se incrementará en un tanto más, y este delito se perseguirá por querella de la víctima u ofendido.
De acuerdo con las estadísticas de la incidencia delictiva de la Fiscalía de Justicia, en agosto del año 2021 se abrieron las primeras carpetas de investigación por este delito con dos casos.
Luego, señala la fuente, se presentó un caso más en diciembre, para cerrar ese año con tres delitos de este tipo en Nuevo León.
La cifra se elevó a cinco delitos en 2022, uno de ellos en el mes de enero, otro en marzo y uno de forma continua en los meses de octubre, noviembre y diciembre.
La racha se mantuvo al arranque del año 2023, al reportar la autoridad un delito de peligro de contagio en el mes de enero.
Preciso mencionar que el delito de peligro de contagio se agregó en las cifras de la Fiscalía en el apartado “Delitos de Peligro”, que incluye, además, abandono de personas y ataques peligrosos.
El 28 de mayo del año 2020, la diputada local Itzel Castillo presentó un dictamen de la Comisión de Justicia y Seguridad Pública, en la que propuso tipificar el delito peligro de contagio, así como duplicar las penas a quien agreda al personal médico.
mvls