Existen algunos alimentos que se consideran prohibidos para los perros, por lo que es importante identificarlos, con la finalidad de evitar que tu mascota sufra una intoxicación.
Hay algunas comidas que los humanos comparten con los perros, como son algunos tipos de carne, sin embargo, algunas frutas y las verduras no suelen llevarse bien con el sistema digestivo de los caninos. Enseguida te diremos cuáles de estos alimentos son perjudiciales para tu mascota, de acuerdo a expertos veterinarios y de crianza de American Kennel Club y ASPCA, Barakaldo Tienda Veterinaria y la revista Zoo Plus.
¿Qué verduras no debe comer mi perro?
La cebolla es indudablemente un alimento que no deben comer los perros bajo ninguna circunstancia debido a que contiene alicina, el cual se libera cuando es masticada y causa una herida oxidativa, y que provoca rotura de los vasos sanguíneos y al final una anemia hemolítica.
El ajo tampoco debe ser ingerido por los perros, ya que contiene alicina que puede dañar su flora intestinal, sin embargo, puede ser engañoso, ya que este alimento también actúa como agente antiparasitario.
Es recomendable no dar puerro a los caninos, ya que contiene sustancias azufradas que si son digeridas en grandes dosis, pueden destruir los glóbulos rojos de la sangre.
Ten en cuenta que tampoco debes darle berenjena a tu perro, ya que es capaz de causar una intoxicación en los caninos, especialmente si ésta es cruda.
Los perros pueden sufrir de dolores de estómago agudos si les das tomate, ya que éste no es digerible para los caninos.
A pesar de que los humanos pueden comer algunas setas, los perros no las aceptan, ya que tienen toxinas que afectan el sistema nervioso, causándoles vómitos, diarrea y en casos graves, estados de shock.
¿Cuáles son las frutas que no debo darle a mi perro?
El aguacate es una de las frutas más peligrosas para los perros, ya que es una toxina fungicida derivada de los ácidos grasos que les causa vómitos, diarrea e incluso una pancreatitis. Además, es importante evitar que tu mascota juegue con el hueso, ya que ahí se concentra la mayor cantidad de estas toxinas.
Las uvas y las pasas son dañinas para los perros, ya que estas pueden provocarles indigestión y afectaciones renales irreversibles a largo plazo.
Si no deseas que tu perro sufra de daños renales irreversibles, no le des grosellas, ya que son iguales de perjudiciales que las uvas y las pasas.
Evitar darle cerezas a tu perro, ya que esta fruta contiene cianuro, una sustancia que lo puede intoxicar, así como interrumpirle el transporte del oxígeno celular.
AA