Baches, encharcamientos y daños son tan solo una parte de lo que ocasionan las lluvias pero la otra cara de la moneda está en los ríos y parajes turísticos.
En el municipio de Juárez, el paraje conocido como Los Tubos trae el agua que nace de la cascada de Charco Azul, ubicada en el Cerro de la Silla.
Adjunto a la zona de San Roque, el predio es conocido por las familias que habitan en el sector como un sitio para refrescarse. Sin embargo las nulas lluvias impidieron que pudieran refrescarse, por lo que tras las precipitaciones de este fin de semana la alegría volvió a sus rostros.
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Aunque fría, el agua del río sirvió para amortiguar la desesperanza que durante meses se apoderó de los habitantes de la zona.
Cristalina y con algunos residuos, es que los habitantes de Juárez disfrutaron una tarde para, con las debidas precauciones, ingresar al río y disfrutar lo que esperan sea el término de una tormentosa sequía.
jvl