Al sur de la Ciudad de México yace 'peluso', un perro labrado en bronce que representa a los miles de 'lomitos' que deambulan por las calles esquivando los autos, desconfiados, cabizbajos, algunos golpeados, pero siempre esperando recibir cariño.
El llamado monumento al perro es un recuerdo triste de la realidad que viven los canes abandonados, aquellos que nunca conocieron un hogar humano. Por eso, existe esta escultura que nos hace reflexionar sobre el maltrato animal y lo que nos falta por hacer para su bienestar.
¿Quién era peluso?
Peluso fue un noble perro callejero que fue rescatado por Patricia España, fundadora del santuario para perros Milagros Caninos. Las condiciones deplorables en las que vivía el perrito orillaron a que los integrantes de la asociación idearan inmortalizarlo en una escultura.
Durante sus últimos meses, peluso vivió rodeado de amor, cariño y cuidados, esos que le faltaron años atrás; estuvo acompañado de otros perros callejeros que estuvieron en el olvido. La organización lo alimentó y le dio una mejor calidad de vida, pero murió el 15 de julio de 2008, es decir, cinco días antes antes de que su monumento fuera inaugurado. El maltrato grave que vivió le provocó insuficiencia renal, moquillo y sordera.
A manera de homenaje, la escultora Girasol Botello se inspiró en la historia de peluso para crear esta escultura que fue develada el 20 de julio de 2008, un día antes del día del perro.
La figura de 89 kilos de peso representa a un perro flaco al que le sobresalen las costillas, cabizbajo, que conmueve, incluso rompe el corazón. En su inauguración le colocaron una placa con unas palabras que para algunos orillan al llanto.
"Mi único delito fue nacer y vivir en las calles o ser abandonado. Yo no pedí nacer y a pesar de tu indiferencia y de tus golpes, lo único que te pido es lo que sobra de tu amor. ¡Ya no quiero sufrir, sobrevivir al mundo es solo una cuestión de horror!¡Ayúdame, ayúdame por favor! Peluso".
Peluso fue abandonado dos veces
Hoy peluso vive abandonado por segunda vez, su monumento quedó en el olvido. De manera paradójica, nuevamente lo rodea la basura, el maltrato y el grafiti. Los maleantes le robaron su placa y lo pintaron, incluso, pocos recuerdan que existe esta escultura.
La buena noticia, es que la escultora creó una réplica de peluso que se encuentra en la organización Milagros Caninos en la alcaldía Xochimilco.
¿En dónde se ubica el monumento al perro callejero?
El monumento de peluso se ubica en la calle Moneda, 14000, en la delegación de Tlalpan, entre el Instituto Nacional de Neurología y el deportivo Vivanco, casi al final de la avenida Insurgentes Sur. Para llegar ahí puedes tomar la línea 1 del metrobús y debes bajar en la estación Ayuntamiento.
Peluso desea ser visitado, hazlo, seguro se te va a apachurrar el corazón.