Un desafortunado incidente mientras acompañaba a su hermano a trabajar, fue el motivo por el que hace 13 años, Alfredo Rodríguez Soriano, recibió un impacto de bala en el cráneo al haber quedado a mitad del fuego cruzado de un enfrentamiento, que se registró en Gómez Palacio, situación por la que desgracia su hermano falleció, mientras que él quedó discapacitado de por vida.
Esta situación provocó que Alfredo perdiera a su familia, así como su empleo en una reconocida empresa de refrescos con presencia a nivel mundial.
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La bala calibre 38 que se encuentra incrustada en su cráneo y que por fortuna no lo mato, le causa dolores de cabeza intensos, ansiedad, así como ataques de epilepsia, padecimientos por los que no puede pensionarse en el seguro social.
Con trabajos eventuales Alfredo ha logrado sobrevivir durante todo este tiempo, sin embargo, al paso de las semanas lo despiden por su condición.
Además, necesita de medicamentos controlados como ácido valproico y melatonina, los cuales tienen un costo que no puede solventar por su situación económica, es por ello que solicitó el apoyo de los laguneros, así como de un abogado que le pueda ayudar a tramitar su pensión.