El estado de Guanajuato acumuló durante el primer semestre del 2023, 63 homicidios de menores de edad con armas de fuego, según lo señaló el Centro de Promoción de los Derechos Humanos de Niñas, Niños y Adolescentes en Guanajuato (NIMA).
Durante el año 2022, se tiene el registro de 140 personas de entre 0 y 17 años las que murieron por homicidio con arma de fuego lo que señala que actualmente va un 45 por ciento de los hechos ocurridos en el 2022, manteniéndose los casos muy por igual en ambos años.
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Recordar que en el último año Guanajuato fue la entidad federativa con más homicidios realizados con arma de fuego contra la niñez y adolescencia, siendo esto, una violación a sus derechos humanos legitimados en la Convención de los Derechos del Niño, y ratificada por México.
Apenas el domingo 17 de septiembre del 2023, un grupo de personas inició un ataque con armas de fuego a una casa ubicada en la colonia Morelos en el municipio de San Francisco del Rincón, donde se encontraba un niño de once años y otro seis, junto a su padrastro. Ambos niños murieron mientras que el adulto resultó herido. Las diferentes versiones y testimonios comparten que el ataque iba dirigido al padrastro de los niños.
Otro hecho fue el ocurrido el pasado miércoles 23 de agosto, donde un niño de 12 años murió, y dos más, uno de 10 y otro de 17 años resultaron heridos, luego de un ataque armado en canchas de fútbol del municipio de San Francisco del Rincón, donde sicarios a bordo de una camioneta llegaron y les dispararon de manera directa cuando jugaban.
Mientras que el 21 de agosto del año en curso, una niña de 10 años falleció y otra de tres años de edad, resultó lesionada tras un ataque armado en contra de un hombre, en el municipio de Purísima del Rincón.
Ante estos hechos ocurridos de manera frecuente el Centro de Promoción de los Derechos Humanos de Niñas, Niños y Adolescentes en Guanajuato (NIMA) ha hecho un exhorto a las autoridades del estado:
“Los hechos ocurridos demuestran que el Estado no está siendo garante de los derechos a la vida, a la seguridad y a la dignidad de niñez y adolescencias. Es por esto que, desde la sociedad civil organizada, nos indignados y manifestamos nuestra solidaridad y exigimos al Estado y a las instancias correspondientes: El reconocimiento de niñas, niños y adolescentes como sujetas y sujetos de derechos humanos; Justicia, verdad y reparación del daño para las víctimas; Una investigación pronta e imparcial de los hechos, así como castigo a los responsables.”