El secretario de Seguridad Pública de Nuevo León, Gerardo Palacios Pámanes informó que dentro de la auditoría que realizarán en la policía de Villaldama, investigarán presuntas irregularidades como la intervención de un escolta del alcalde en las decisiones de la corporación.
Luego de que dos escoltas fueran calcinados en la Carretera a Colombia, trascendió que uno de los fallecidos asumía funciones de secretario de seguridad interino sin tener un nombramiento oficial.
Esto fue confirmado por el funcionario quien reconoció como único titular a Rodolfo Gutiérrez, que también funge como secretario de Ayuntamiento de Villaldama.
En tanto dijo que la intervención de Fuerza Civil en esta localidad será por tiempo indefinido mientras se recupera la tranquilidad y se realiza una auditoría al interior de la policía municipal.
Por otra parte, a un año de haber tomado las riendas de la Secretaría de Seguridad, Palacios Pámanes dijo que el principal desafío que enfrenta es la violencia que se presenta en el noreste del país.
Estado toma control de seguridad en Villaldama
El secretario de Seguridad Pública del Estado, Gerardo Palacios Pámanes, confirmó que a partir del pasado martes tomaron el control de la corporación policiaca del municipio de Villaldama.
A través de sus redes sociales, el funcionario Estatal confirmó dicho acto tras los incidentes de inseguridad que han pasado en las últimas semanas.
"A partir de hoy (el martes), con fundamento en la Ley de Emergencia Policial, el Estado asume por completo la seguridad pública de Villaldama", publicó el funcionario estatal.
Cabe recordar que el lunes el Gobierno del Estado, por medio del Periódico Oficial, dio a conocer que debido a las situaciones de inseguridad que se viven en Villaldama, tomará de manera inmediata y transitoria la facultad para emitir órdenes a la Secretaría de Seguridad Pública de esa localidad.
El fin de semana se dio a conocer que tras la ola de violencia registrada el fin de semana en Villaldama, y en demanda de mejores condiciones para desempeñar su trabajo, 16 policías municipales decidieron dejar de patrullar, y se turnaron para hacer recorridos, de tres elementos cada uno en una sola patrulla.
Ante tal situación y para no dejar desprotegida a la comunidad, elementos de la Fuerza Civil y del Ejército Mexicano se desplegaron en aquella localidad.
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