Maxheli Joseline Aguilar Tapia era una joven de 37 años, quien murió tras someterse a una operación estética en la Clínica Venecia, la cual, sigue operando con normalidad en la ciudad de Puebla.
De acuerdo con los expedientes, el pasado 23 de febrero, Maxheli Joseline acudió a la Clínica Venecia, ubicada en la colonia Santa María . En ese lugar acordó con un grupo de supuestos especialistas médicos, le realizara dos cirugías estéticas, una de reducción de busto y otra de lipotransferencia, procesos quirúrgicos para el que ya se le había catalogado como candidata.
Previamente, la madre de Max, Mónica Tapia, expresó a la cirujana responsable que Maxheli podría presentar un problema hereditario con el sangrado excesivo en intervenciones de ese tipo; sin embargo, los médicos señalaron que todo estaría bien en el proceso.
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Después de más de ocho horas de operación, Max sufrió un paro y para cuando sus familiares pudieron verla, ya había sido intubada. Ante lo ocurrido, especialistas acudieron a la clínica y ordenaron el traslado inmediato de la paciente al Hospital General del Sur, donde tendría que ser valorada por un neurólogo ante posibles daños irreparables en el cerebro.
Fueron 17 días los que Max y su familia continuaron dentro de un hospital, hasta que la joven murió. Durante ese tiempo, a decir de sus familiares, fueron hostigados por abogados de las médicos involucradas que buscaban el perdón legal y al no ceder, argumentaron que se ampararían ante cualquier denuncia.
La familia de Max y el personal del Hospital General del Sur, presentaron una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) por los delitos de negligencia médica, homicidio culposo y lo que resulte.
Hasta el momento, la Clínica Médica Venecia sigue operando en la calle 5 Norte número 4613. De acuerdo con su página, en el lugar también ofrecen consultas en áreas como: Pediatría, Ginecología, Nutriología y Psicología.
GO