Con un fondo de casi nueve millones de pesos y la colaboración de varias universidades del país como es la Universidad Juárez del Estado de Durango y el Centro de Investigación del Agua y Derechos Humanos será desarrollado durante el próximo año, el Proyecto de investigación e incidencia en materia de salud y ambiente para lograr justicia para La Laguna.
Durante el primer encuentro de investigadores de la UJED, UNAM y de las Universidades Autónomas de San Luis Potosí y Yucatán, propusieron el programa que busca estudiar a detalle el comportamiento del acuífero principal y mantos freáticos de la Comarca Lagunera, la vigilancia epidemiológica sobre las poblaciones afectadas por hidroarsenicismo y la calidad del aire.
“Hasta ahorita con el problema de arsenicismo se ha buscado mejorar la calidad del agua y darle a la población mayor cantidad, pero no se tiene una vigilancia de cómo está la población en cuanto a sus efectos por consumo de arsénico y otros metales”, señaló Gonzalo García Vargas, investigador de la UJED.
Sostuvo que el consumo recurrente de arsénico y flúor afecta dientes y huesos que es lo tradicional que se sabe, pero en los últimos diez años las nuevas investigaciones muestran evidencia de que dañan el desarrollo cognitivo de los niños.
La investigación abarcara las zonas con mayores niveles de metales pesados como son el norte de Francisco I Madero y San Pedro, Matamoros y Tlahualilo, ya que registran altas concentraciones buscando su seguimiento a través de las herramientas necesarias para la vigilancia epidemiológica al detonar enfermedades como la diabetes mellitus, cáncer de piel, pulmón, vejiga y riñón, además de problemas vasculares y pulmonares que pueden ser incapacitantes para la población económicamente activa.