Al Metro de la Ciudad de México lo rodean miles de historias, mitos y leyendas, entre ellas, una muy tenebrosa, la cual, con solo escuchar su nombre provoca que se erice la piel.
Se trata de la Niña Caníbal del Metro Tacubaya, la cual ocurrió en la Línea 1, también conocida como la Línea Rosa, en donde se relata, que una pequeña llamada Rosarito, se perdió dentro de las instalaciones de este transporte, por ahí de los años 70.
Rosarito Sánchez Sierra, tenía tan solo 8 años edad cuando se extravió al soltar la mano de su madre, luego de que la multitud que transitaba de un punto a otro y provocó que ya no se volvieran a ver.
Para dar con el paradero de la pequeña Rosario se abrió una investigación en la que se dice que se encontraron algunos cuerpos mutilados. Lo que jamás se imaginó la policía fue que la causante de estos incidentes era una niña, Rosarito, ya que, dentro de la investigación, los reportes narran que al menos tres testigos vieron a la niña caníbal matar a un indigente.
Fue hasta el 22 de septiembre, cuando policías encontraron a Rosarito, estaba escondida todavía en los túneles de la zona, y ella misma terminó por narrar los crímenes que cometió.
Según las declaraciones de Rosarito, al perder de vista a su madre la única solución que encontró fue esconderse entre los túneles del Metro donde permaneció por mucho tiempo, hasta que empezó a sentir mucha hambre.
“Estuvo andando por los caminos, hasta que llegó el momento que encontró un vagabundo tirado. Se percató que estaba muerto, pero no se hace mucho. Se nota que había caído y perdido la vida en el acto, vio algunas ratas comiendo, pero no le importó, ella tenía demasiada hambre y se incorporó también a comer junto con ellas”, detalló para TELEDIARIO, Jezael Rojas, especialista en temas paranormales.
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Algunos dicen que no fue llevada a la cárcel por el mal momento que vivió al perderse de su madre, pero eso sí, fue encerrada en un hospital psiquiátrico por los daños que tuvo. Se dice que Rosarito murió en 2010.
PGG