Bajo la consigna 'Madres luchando y exigiendo justicia', integrantes del colectivo Amorosas Madres contra la Violencia Vicaria (Cam–Cai) se sumaron a la marcha del 8 de marzo en Puebla.
El contingente, en el que participaron la líder del Comité Directivo Estatal del Partido Acción Nacional (PAN), Augusta Díaz de Rivera, así como la presidenta de la mesa directiva del Congreso local, Aurora Sierra, partió poco antes de las 16:00 horas de las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE), en la 31 Oriente y bulevar 5 de Mayo, rumbo al Zócalo.
Entre puños levantados, cantos, porras y pancartas, madres que han sido separadas de sus hijos demandaron justicia contra esta forma de violencia de género.
A lo largo de la movilización, mujeres y jóvenes lanzaron diferentes consignas contra todo tipo de violencia, en especial, contra los padres que buscan hacer daño a sus exparejas a través de la sustracción ilegal de los hijos o hijas.
Las integrantes de las colectivas señalaron que ha sido un largo camino el lograr que se reconozcan los derechos de las mujeres y se vincule a proceso a los agresores por este delito.
En el marco de esta protesta se exhibió el caso en Puebla de Ricardo "N", quien se convirtió en el primer procesado como presunto responsable del delito de violencia vicaria en Latinoamérica.
Las integrantes de las colectivas Cam-Cai y Madres Luchando y Exigiendo Justicia se sumaron al contingente que integraron diferentes grupos feministas que tomaron las calles de la capital poblana para exigir un alto a la violencia de género y justicia ante casos de feminicidio.
Qué es la violencia vicaria
De acuerdo al 'Estudio sobre análisis de datos de casos de violencia vicaria extrema: Violencia vicaria: Un golpe irreversible contra las madres', el término refiere que es una modalidad de violencia de género que toma a las hijas e hijos como objeto para continuar el maltrato y la violencia sobre la mujer. A veces, esta violencia se ejerce sobre otra persona significativa para ella, llegando incluso a dañar a las mascotas. El objetivo final es dañar a la mujer, “golpearla donde más duele”.
El término vicario se toma como adjetivo, que viene definido según la RAE, como aquello que ocupa el lugar de otra persona o cosa.
GO