Una denuncia compartida en redes sociales ha causado indignación tras revelar presuntos abusos hacia animales en la reserva “Camino Real del Tigre” en Mazamitla, Jalisco. Según los testimonios, tigres, leones y panteras son drogados para permitir que los turistas se tomen fotos con ellos. Estos animales, tanto adultos como cachorros, se encuentran en un estado de letargo debido a las sustancias que supuestamente se les administran.
El maltrato va más allá del estado de los animales, ya que se informa que estos felinos son sometidos a condiciones deplorables. Están sujetos con cadenas tan cortas que no les permiten moverse o erguirse, lo que genera un sufrimiento innecesario. Los turistas, al no ver respuesta de los animales, continúan tocándolos y fotografiándolos, mientras los felinos permanecen inmóviles, aparentemente dormidos.
¿Cómo son maltratados los animales en "Camino Real del Tigre"?
Los videos compartidos en redes sociales muestran a los animales en una postura inmóvil durante horas, con los ojos cerrados, lo que indica un alto grado de sedación. Los visitantes levantan las cabezas de los felinos para las fotos, sin ninguna respuesta de su parte, lo que pone en evidencia el abuso que padecen. Las denuncias apuntan a que estos animales no están siendo cuidados adecuadamente ni en su salud ni en su bienestar físico.
Se ha señalado que el lugar, lejos de ofrecer un refugio para los animales, los convierte en meras atracciones turísticas. Además de los felinos, también se ha reportado abuso hacia otros animales, como monos, a quienes se les maltrata para que sigan las órdenes de los cuidadores. Esto ha sido captado en videos donde se observa a una mujer mordiendo la cola de una mona para que se mueva, un acto cruel y totalmente inaceptable.
¿Qué dicen los turistas y las autoridades?
Los turistas que han visitado “Camino Real del Tigre” han mostrado su desaprobación a través de redes sociales, denunciando la situación de los animales. En sus publicaciones, mencionan que los cachorros permanecen dormidos durante los recorridos de tres a cuatro horas, lo que plantea serias dudas sobre el trato que reciben. A pesar de las denuncias, las autoridades locales no han intervenido ni han emitido un comunicado oficial, lo que genera más frustración entre los defensores de los derechos animales.
Los activistas piden que las autoridades federales y locales intervengan y clausuren el lugar para evitar más sufrimiento hacia los animales. Se insta a los turistas a no visitar el centro para no contribuir al abuso y a reportar cualquier acto similar. La presión pública continúa creciendo, pidiendo un cambio en la legislación para proteger a los animales en cautiverio.
¿Qué se necesita para evitar este tipo de maltrato?
Para proteger a los animales en cautiverio y evitar que sean explotados como atracciones turísticas, es necesario que se refuercen las leyes y regulaciones que garanticen su bienestar.
Los activistas piden la creación de santuarios adecuados donde los animales puedan vivir en condiciones apropiadas, sin ser utilizados para entretenimiento humano. Además, se debe promover la educación sobre los derechos de los animales y sensibilizar a los turistas sobre los riesgos de apoyar estos lugares.
MQ