Dicen que si vas a la feria de León y no te comes una manzana de caramelo es como si no hubieras ido y es que desde hace casi 60 años ya son una tradición para los panzas verdes, sobre todo en días como el 20 de Enero que es el aniversario de la Fundación de León.
El señor Ramón Jiménez Sánchez fue el iniciador del proyecto hace 59 años cuando la feria se realizaba todavía en el centro de León, comenzaron con un pequeño local y hoy ha logrado expandirse en varios espacios de la feria estatal.
La historia nos la contó Alejandro Jiménez Torres, uno de sus hijos que ha continuado con la tradición de vender fruta rebanada durante otras temporadas del año e innovar con otros productos durante la feria como las fresas con crema, manzanas con chile y su producto estrella, las manzanas con caramelo que cuestan 25 pesos.
“Dice que fue de unos camaradas que vinieron de México y pusieron una carpita al lado de él así como estamos ahorita aquí y él se empezó a fijar y pues se aventó a hacerla y no, pues no le salía, dice que esa vez quemó como una tonelada de azúcar y que al último le empezó a salir más o menos”, comentó.
Con el paso del tiempo, “Manzanas El Chino”, un negocio que surgió de la colonia Obrera, un barrio leonés, ha cobrado relevancia y se ha convertido en una tradición para todos los asistentes de la feria, sin embargo, tampoco han estado a salvo de la crisis por la pandemia y la situación les ha afectado hasta un 50 por ciento.
Pero el equipo familiar no ha dejado de innovar y para este año traen productos nuevos como la manzana de caramelo en charola con chamoy, pero ¿Cómo se hace el caramelo?
“Para iniciar se le echa agua y la glucosa (que es para que el caramelo no se pegue en los dientes) ya después la misma glucosa, el agua te empieza a pedir la azúcar y ya tú le vas checando, después le checas en un botecito”, agregó.
Después se deja secar y se tienen que asegurar de que el caramelo no quede chicloso, de ser así, quiere decir que le falta más azúcar hasta que queda al punto de que se “encarameliza”, luego se le unta el colorante vegetal y la grosella.
Una vez que las manzanas ya están cubiertas y completamente rojas, se empaqueta y quedan listas para que los clientes las puedan degustar.