A raíz del anuncio sobre la construcción de las nuevas líneas del Metrorrey y los trayectos que estas abarcarían, parte de la ciudadanía ha mostrado su descontento con los trazados del proyecto y sobre todo con el hecho de que el viaducto sea elevado.
El secretario de Movilidad, Hernán Villarreal reafirmó que el proyecto del metro elevado fue el más viable económicamente y también para evitar mayores afectaciones en la vialidad y por ende, en el transito de los ciudadanos alrededor de la urbe.
El proyecto de las líneas 4, 5 y 6 costará 30 mil millones de pesos e incluirá la construcción de viaductos, estaciones y la adquisición de vagones.
Las empresas que se encargarán del proyecto serán Motaengil de México, CRRC Hong Kong y CRRC Nanjing Puzhen.
El funcionario detalló que la Línea 6 del Metro, próxima a comenzar las obras será una edificación esbelta y tipo monorriel.
Indicó que si las nuevas líneas fueran subterráneas como parte de la opinión pública lo solicita, la elaboración del proyecto sería cinco veces más cara, por lo que si se contemplaban 50 kilómetros de construcción, el Estado sólo podría concretar 10 kilómetros.
También mencionó que para la elaboración de un metro subterráneo tendrían que romper casi por completo la carpeta asfáltica en los tramos implicados, por lo que afectarían aún más las vialidades y la vida cotidiana del ciudadano.
Los trabajos para la Línea 6 del Metrorrey iniciarán el próximo sábado 11 de febrero y durarán al menos seis meses en su primera etapa, a partir de la avenida Prolongación Madero, para terminar por completo con las afectaciones viales presumiblemente en un año.
La ruta trazada para la Línea 6 es del Hospital de Ginecología y Obstetricia del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ubicado en avenida Félix U Gómez y Constitución, hasta el Centro de Apodaca, lo cual se traduce en 16 kilómetros de construcción, lo que sería la línea del Metro más larga en Nuevo León.
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