Un grupo de aproximadamente 800 migrantes arribó a los patios de Ferromex ubicados en la colonia Braulio Fernández Aguirre de Torreón el martes 19 de septiembre. La mayoría de estos migrantes provenían de Venezuela y habían estado realizando un peligroso viaje durante aproximadamente un mes y medio en busca del sueño americano.
Eran las 6 de la tarde cuando este gran contingente de migrantes llegó a las instalaciones de Ferromex. La noticia rápidamente llamó la atención de las autoridades locales, quienes coordinaron una respuesta inmediata para brindarles ayuda y atención.
Jorge Luis Juárez, director de Protección Civil, destacó la importancia de la coordinación entre el municipio y la Casa del Migrante para atender de manera efectiva situaciones como esta, y se activó el Mando único para asegurar una respuesta organizada.
Diferentes dependencias se movilizaron para apoyar a los migrantes, incluyendo personal de la SEDENA, la Guardia Nacional, la Policía Municipal, la Policía Estatal, los Bomberos y dos ambulancias de la Cruz Roja Mexicana. Los paramédicos brindaron atención médica a hombres, mujeres y niños, proporcionándoles agua, alimentos y cobijas.
Afortunadamente, la mayoría de los migrantes se encontraban en buen estado de salud, aunque algunos presentaron golpes e infecciones estomacales. Un joven llamado Javier André Lucena Alvarado, de 24 años, que se encontraba en la Casa del Migrante, fue trasladado a un hospital debido a una probable fractura de pierna.
A pesar de las dificultades y los riesgos que enfrentan en su viaje, los migrantes mantienen la esperanza de alcanzar el sueño americano. Muchos de ellos tienen familiares o amigos esperándolos al otro lado de la frontera, lo que les da la motivación para continuar. Incluso en medio de las adversidades, algunos como José Gregorio, originario de Venezuela, destacaron el trato que han recibido en México y la solidaridad de la población mexicana.
"Duro, bastante duro, nada fácil, pero somos unos guerreros y tenemos que luchar contra todo, en realidad México no es como uno lo escuchaba, en realidad México nos ha tratado bien, y la población mexicana es bastante humilde, también nos ha apoyado mucho", comentó Gregorio a las cámaras de Telediario.
Finalmente, alrededor de 800 migrantes abordaron diferentes trenes para continuar su travesía. El último contingente se subió al ferrocarril con destino a Piedras Negras, que partió a las 3 de la madrugada. Con la esperanza de alcanzar el sueño americano, estos migrantes continúan su viaje, enfrentando incertidumbres y desafíos en su búsqueda de una vida mejor en Estados Unidos.
IML