La vida de María Luisa Saavedra cambió por completo cuando sin darse cuenta, afuera de su casa su pie se enredó con un cable de fibra óptica y tras avanzar varios metros, ocasionó una herida irremediable.
Sus hijos la trasladaron de forma inmediata hacia una clínica donde fue necesario practicarle una cirugía para salvar su pie.
Sin embargo, tras el accidente su vida cambió por completo, a nueve meses de aquel día la herida no ha cerrado por completo, apenas puede dar algunos pasos, ya no puede trabajar ni acercarse a la estufa para cocinar.
Además, dejó secuelas como trombosis y problemas de circulación en la mujer de 56 años.
Desafortunadamente, existían antecedentes y reportes referentes a ese cable, perteneciente a la compañía Izzi.
Pese a que la habitante de la colonia Las Brisas, en Monterrey, cuenta con un dictamen municipal que certifica que el accidente fue causado por el cableado, la empresa no se ha hecho responsable de los gastos.
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