Ante la demora de personal de Agua y Drenaje para reparar una fuga de líquido potable, un agente de tránsito de Monterrey entró al quite, y con el ingenio que caracteriza al mexicano, logró que la cantidad que se desperdiciaba fuera menor.
Raúl García Colunga, quien patrullaba la colonia Primavera, recibió un par de reportes de vecinos quienes le alertaron que un sinfín de litros de agua potable se estaban fugando afuera de un domicilio de la calle Playa La Pesca, metro antes de llegar a Revolución.
La presión con la que salía el agua, provocó que una pieza de cobre reventara y posteriormente el agua brotó con gran fuerza unos dos metros de altura.
Desesperado porque no hubo respuesta de Agua y Drenaje, y consciente del desperdicio, lo que hizo el oficial de tránsito fue buscar un palo de madera y tapar el orificio de donde se fugaba el agua.
Por más de 15 minutos intentó constantemente, pero la fuerte presión impedía tapar la fuga por completo, hasta que consiguió un martillo y logró introducir el palo de madera.
Aunque se seguía desperdiciando algo de líquido, la cantidad bajó considerablemente.
El agente de tránsito reportó al C-4 la situación para que Agua y Drenaje actuara al respecto, más no hubo respuesta inmediata y la fuga se prolongó por más de una hora.
García Colunga, quien terminó empapado, mencionó que, aunque no es una tarea que le corresponda, es una situación que le causa indignación y molestia porque él batalla día con día en su hogar con el desabastecimiento del servicio, por lo que, al ver la fuga, hizo lo posible por contenerla.
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