Una mujer identificada como Elisa 'N', de 31 años, quien había sido detenida por la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) tras confirmarse el maltrato constante y cruel hacia su hija Irina, de apenas 6 años, fue puesta en libertad por una jueza.
La madre fue vinculada a proceso por el delito de violencia familiar; no obstante, la jueza Norma Figueroa Figueroa autorizó que la acusada lleve su juicio fuera de prisión.
Las autoridades únicamente le impusieron como medida cautelar la prohibición de acercarse a la niña o a su vivienda.
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Los hechos se desarrollaron en una unidad habitacional de la colonia Prohogar, en la alcaldía Azcapotzalco, Ciudad de México.
La situación de violencia fue descubierta gracias a los reportes constantes de los vecinos, quienes alertaron a las autoridades al escuchar gritos, llantos y golpes de manera recurrente.
Las imágenes y testimonios revelaron el nivel de crueldad en los castigos aplicados por Elisa contra su propia hija, pues la menor era golpeada, pateada y amarrada, así como se conoce que presuntamente era torturada.
Los allegados aseguraron que la madre ataba a la niña de las manos hasta cortarle la circulación, dejándola atada por horas, incluso mientras ella se iba a trabajar, mostrando "total indiferencia ante el sufrimiento de su pequeña".
Por ello, agentes de la SSC del sector La Raza acudieron al domicilio de la calle 15, en la colonia Prohogar. Al llegar, un oficial tocó a la puerta y encontró a la niña completamente sola.
Al ganarse la confianza de la menor, los agentes detectaron marcas de violencia en su cuerpo, incluyendo moretones en distintas partes. Tras unos minutos de diálogo, la niña confesó que su madre la maltrataba diariamente.
El momento más crítico fue cuando la pequeña le confirmó a los policías que su madre no solo la golpeaba, sino que "la quiere matar".
Ante la gravedad de la declaración, los uniformados lograron sacar a la niña del inmueble para resguardarla.
Una ambulancia valoró a la menor, detectando fuertes golpes en la cabeza, brazos, abdomen y piernas, así como moretones en la espalda y piernas, y raspones, evidencia de maltrato constante.
Tras la detención de Elisa, la mujer fue enviada al penal de Santa Martha Acatitla, pero en la audiencia, celebrada el domingo 30 de noviembre, la jueza Norma Figueroa Figueroa optó por dejarla en libertad.
Actualmente, Irina se encuentra bajo resguardo de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJ CdMx), en el centro de estancia transitoria, mientras se le busca un sitio seguro para su recreación y crecimiento.
SCM