En Guanajuato, la inseguridad es una realidad que afecta de manera significativa a las mujeres, quienes, según los datos más recientes de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE), enfrentan altos índices de violencia y criminalidad.
Durante 2023, un 78.2 por ciento de las mujeres declaró sentirse insegura, lo que refleja un aumento en la percepción de peligro en comparación con el 65.9 por ciento de los hombres. Este temor generalizado se asocia principalmente con el aumento de delitos que van desde robos y asaltos en la vía pública hasta el fraude y la extorsión.
La ENVIPE detalla que durante este año se reportaron 623 mil 108 delitos cometidos contra mujeres en la entidad, destacando el robo o asalto en la vía pública o transporte público, con 125 mil 196 casos. También se registraron 104 mil 969 casos de fraude y otros 103 mil 608 delitos diversos. Estas cifras marcan un claro incremento con respecto al 2022, cuando se contabilizaron 449 mil 427 delitos, lo que demuestra un alarmante deterioro en la seguridad, afectando principalmente a las mujeres.
Las cifras contrastan con los delitos denunciados por hombres, quienes reportaron 567 mil 653 delitos en 2023, una cifra inferior en comparación con los delitos cometidos contra mujeres. Sin embargo, los tipos de delitos reportados por ambas poblaciones son similares: robo, fraude y extorsión son los más comunes, lo que subraya la vulnerabilidad tanto de hombres como de mujeres en la entidad, aunque estas últimas enfrentan una mayor sensación de inseguridad.
La creciente violencia ha generado que muchas mujeres modifiquen su rutina diaria, evitando lugares públicos o actividades que antes consideraban seguras. Las mujeres se ven obligadas a evitar salir de noche o acudir a zonas peligrosas, lo que afecta su libertad de movimiento y bienestar. Este panorama evidencia una necesidad urgente de fortalecer las estrategias de seguridad pública y crear políticas que garanticen la protección de las mujeres en el estado.
Además, organismos civiles y expertos en seguridad han señalado la importancia de implementar medidas que reduzcan la violencia de género y fomenten una mayor presencia de programas de apoyo y protección para las mujeres que sufren algún tipo de delito. La mejora en la infraestructura de vigilancia, el fortalecimiento de las autoridades y el incremento de campañas de concienciación sobre la violencia hacia las mujeres también son propuestas en la agenda para enfrentar esta situación.
El crecimiento de la inseguridad en Guanajuato ha puesto en el centro del debate público la urgencia de garantizar entornos más seguros para la población femenina, no solo en espacios públicos sino también en ámbitos privados, donde la violencia familiar y de género sigue siendo un desafío importante.