Cuatro semanas después de que un niño fue vacunado contra el covid- 19 en una clínica clandestina en el Estado de México, resultados de laboratorio apuntan a que, en efecto, se le aplicó una dosis de Pfizer y el menor generó anticuerpos producto de la inmunización.
Luego de que su madre consiguió la vacuna y que el caso fue revelado en MILENIO Televisión y TELEDIARIO, la familia del menor esperó un mes para realizar las pruebas clínicas encaminadas a determinar los contenidos de la inyección.
Los resultados, obtenidos la semana pasada, arrojaron que la prueba de anticuerpos totales anti- SARS-CoV-2 post dio positivo a espícula-1, lo que significa que sí fue inyectado con una dosis real de Pfizer y que cuenta con protección contra este tipo de coronavirus, a decir de especialistas consultados por TELEDIARIO.
La vacuna, en su momento, fue promocionada en redes sociales como traída directamente de Texas, a un costo de 150 dólares, unos 3 mil 178 pesos mexicanos. Al pedir informes los proveedores mexicanos detallaron que tenían un contrato con una clínica de Laredo para a aplicar las dosis de Moderna y Pfizer para adultos, así como las de Pfizer Kids para menores de 5 a 11 años.
La reservación en esa clínica clandestina se hacía con un adelanto de 50 dólares y en el link proporcionado podía elegirse la ciudad donde se deseaba recibir la supuesta vacuna
Tras revelarse en TELEDIARIO, la existencia de la falsa clínica en el Estado de México, que ya llevaba semanas operando, los dueños de la misma desaparecieron la noche de la emisión televisiva, por lo que se adelantaron a cualquier operativo de las autoridades.
A la mañana siguiente, cuando inspectores federales y estatales arribaron a la dirección, ya no había nadie. Aunque la Comisión Federal para la Protección contra riesgos Sanitarios (Cofepris) abrió una investigación, hasta hoy no han informado nada al respecto.
Pero durante su operación, la clínica concurrida clientela. La familia del menor que acudió a vacunarlo y que grabó parte del proceso constató que había al menos dos decenas de personas y que la inyección era aplicada por personas que hablaban inglés.
Incluso, cuando el menor de 10 años acudió a su cita, el pasado 26 de enero pasado, se le entregó un comprobante del Centro para el control de enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) en el que se afirmaba que la dosis recibida era Pfizer pediátrico.
Al comprobarse que el niño que recibió la primera dosis de Pfizer, necesitará la segunda para completar el esquema, al igual que todas las personas que acudieron al lugar para vacunarse.
lvm