Después del sismo de 4.5 registrado en Montemorelos, Nuevo León, diputadas federales y locales presentaron una serie de exhortos para reconocer a Nuevo León como zona sísmica, al tiempo que debe haber alertas como sucede en Ciudad de México.
La diputada federal, Lilia Olivares, dijo que del 2018 y 2024 se han registrado más de 150 sismos en territorio nuevoleonés, de acuerdo con reportes del Servicio Sismológico Nacional.
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Lilia Olivares recordó que una alerta sísmica temprana es un conjunto de instrumentos y protocolos que detectan a tiempo los movimientos sísmicos.
“El Sistema de Alerta Sísmica Temprana es un conjunto de instrumentos tecnológicos, protocolos y mecanismos de comunicación que detectan oportunamente movimientos sísmicos".
Este sistema emite una alerta inmediata para que la población, autoridades y sectores estratégicos adopten medidas preventivas y de protección con el objetivo de reducir riesgos y daños, explicó la diputada.
Olivares añadió que la implementación y operación del Sistema de Alerta Sísmica Temprana corresponderá a la autoridad estatal o municipal competente, en coordinación con el Sistema Nacional de Protección Civil.
Además, enfatizó que deberá cumplir con estándares técnicos nacionales e internacionales en materia de detección sísmica y comunicación de riesgos.
Por otra parte, la diputada local de Morena, Greta Barra, dijo que la autoridad estatal deberá pedir a las dependencias realizar una campaña de promoción con todas las instituciones pública y privadas, a fin de participar en los simulacros sísmicos nacionales.
“El sismólogo también advierte que podrían presentarse sismos más fuertes en el futuro, por lo que el estado debe comenzar a prepararse, especialmente en lo que respecta a la actualización de códigos de construcción y normas de seguridad estructural".
Finalmente, describió como una necesidad que autoridades de Nuevo León implementen protocolos de prevención y seguridad sísmica.
“Es necesario que las autoridades de Nuevo León implementen protocolos claros de prevención y seguridad sísmica, así como medidas de capacitación, simulacros, y una regulación de la construcción de nuevos edificios, adaptados a las normativas sísmicas”.
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