El Palacio de Gobierno de Nuevo León es uno de los edificios más emblemáticos de la entidad, el cual ha sido testigo de la gran transformación de la Sultana del Norte.
Pero, ¿de quién fue la idea de su construcción?, aquí te contamos la historia de este sitio.
El origen
El antiguo despacho del gobierno estatal se encontraba en la calle Morelos en su cruce con Escobedo, justo donde ahora se encuentra el paseo comercial Morelos, en el Centro de Monterrey.
En ese mismo sitio, fue la sede de la Presidencia de la República cuando Benito Juárez tuvo que mover la capital del país durante la intervención francesa.
Cuando llegó el General Bernardo Reyes a la gubernatura del Estado, consideró que la antigua sede ya no cumplía con las condiciones que se requerían, y buscando mejorar la imagen de la ciudad, decidió construir el nuevo edificio.
El proyecto se llevó a cabo por el ingeniero Francisco R. Beltrán, quien también construyó el extinto Puente Juárez, el Palacio de Gobierno de Guadalupe, el Casino Monterrey, entre otros. La construcción inició el 4 de abril de 1895 en la llamada Plaza de la Concordia, hoy conocida como la Explanada de los Héroes.
Pese a que se había contemplado que la obra concluyera en 1900, no fue hasta 1908 que terminaron los trabajos.
El edificio fue elaborado con cantera rosa que fue traída desde San Luis Potosí, por lo que contrataron a cientos de trabajadores de dicha entidad, ya que eran especialistas en ese material.
Entre los elementos que más destacan son las columnas corintias, la estatua de “La Victoria” y los hermosos vitrales elaborados por la entonces Vidriera de Monterrey, diseñados por la prestigiada Casa Claudio Pellandini, la cual también realizó los vitrales del Palacio de Bellas Artes.
Marcha del 8M deja daños al Palacio de Gobierno
El pasado 8 de marzo se llevó a cabo una marcha a nivel nacional para exigir justicia por las mujeres que han sufrido algún tipo de violencia o discriminación.
Durante la manifestación, algunas de las asistentes realizaron destrozos en este sitio emblemático, dejando pintas en las paredes y daños en los vitrales.
Los vitrales, de los cuales tres tienen un daño superior al 80%, serán restaurados en Casa Montaña un taller de Torreón que ya los salvó en 2017 cuando fueron destruidos.
Hasta la fecha continúan las reparaciones en el sitio, y no se tiene fecha exacta para concluirlas.
mvls