Por solicitar a sus vecinos que bajaran el volumen de la música durante las madrugadas de la temporada de pandemia, una familia torreonense perdió desde hace dos años la tranquilidad de su hogar, pues a pesar de que decidieron levantar una barda divisoria en el área que los planos del Infonavit señalaban como de su propiedad, continuamente son hostigados y agredidos física y verbalmente por sus vecinos.
Daniel Torres y su esposa Rocío Rosales han interpuesto las denuncias ante las autoridades del Tribunal de Justicia Municipal y de la Fiscalía de Justicia del Estado de Coahuila, por lo que exigen agilizar los procesos judiciales y girar ordenes de restricción que garanticen la seguridad de su familia.
“Esta situación que se ha tornado ya agresiva de dos años para acá, muy fuertes por parte de la psicóloga Mayra Berenice Moreno Vázquez y el licenciado Mario Moreno Ibarra, ya ayer esto fue más fuerte porque ya el yerno vino a agredir a mi esposo con un desarmador aquí a la puerta, estaba recargado en la salida de mi domicilio. En la pandemia se les pidió el favor de que le bajaran el volumen a su bocina porque eran fiestas de lunes a lunes hasta las cinco o seis de la mañana, hable con Mayra Berenice y me responde que no que entonces cuando su esposo se iba a divertir. Trate de hablar con el licenciado Mario Moreno y me dijo mándales el anti ruido que al cabo yo pago la multa y les traigo otra vez la bocina”, recordó la afectada.
El problema se agudizó cuando la familia deciden instalar una barda para dividir espacios entre los domicilios ubicados en la avenida Morelos en la colonia Nuevo Torreón, entonces empezaron las agresiones más intensas.
“Y ahí sucesivamente empezaron las agresiones más fuertes, le dice al marido que nosotros le hacemos, le decimos o le echamos, y el nos empieza agredir, me sigue a la tienda, me amenaza en la tienda y hasta en el bulevar Revolución”, apuntó.
Señaló que los vecinos señalan tener influencias, por lo que decidieron contratar un abogado para interponer las denuncias ya que en el Tribunal de Justicia solamente fueron citados a dos audiencias y ya no se le dio seguimiento a los casos, sin embargo, el acoso va en aumento, incluso tuvieron que instalar cámaras de video vigilancia pero ni eso ha inhibido a los agresores.
Solicitaron que las autoridades pongan atención en los problemas vecinales que ponen en riesgo la seguridad de las familias.