Mientras el pronóstico alentador de lluvias de la semana pasada no se cumplió, las presas de Nuevo León siguen en caída.
La falta de lluvia y las altas temperaturas ha afectado principalmente a los embalses ubicados en Linares y Santiago.
Desde el lunes en Cerro Prieto ya se usa el sistema de bombas flotantes para extraerle agua y en el caso de La Boca, según Agua y Drenaje de Monterrey, le queda menos de un mes si no se presentan lluvias.
Según datos de la Comisión Nacional del Agua, este domingo Cerro Prieto está con 31.375 millones de metros cúbicos de capacidad, por debajo de los 33.688 millones de metros cúbicos reportados el pasado 20 de agosto.
Actualmente, se encuentra con un 10.13 por ciento de su almacenamiento.
La presa La Boca pasó de 7.192 millones de metros cúbicos que tenía la semana pasada a 5.913 millones de metros cúbicos, es decir, un 17 por ciento de su llenado.
La presa El Cuchillo, se encuentra con 498.255 millones de metros cúbicos, menor a los 500.691 reportados el pasado 20 de agosto.
Actualmente, el embalse ubicado en China, está con un 44.36 por ciento de su almacenamiento.
El viernes llegaron a Nuevo León las primeras bombas para el acueducto, el Cuchillo 2, con las que se espera cumplir la inauguración de la obra hídrica el 13 de septiembre.
Con la obra se espera que se incremente la cantidad de agua que llega el área metropolitana de Monterrey, lo que ayudaría a evitar una crisis como la del año pasado.
Hace algunos días, el titular de Agua y Drenaje de Monterrey, Juan Ignacio Barragán, reconoció que se equivocó en los pronósticos de lluvia, lo que generó problemas en el abastecimiento de agua a la población, el gobernador Samuel García presumió de nueva cuenta que el tema de la crisis de agua ha quedado resuelto.
"Gracias a Dios hemos podido resolver temas como la luz, como el agua, entre otros, migración, etcétera, que son los que piden estas grandes empresas transnacionales cuando se instalan, no hemos perdido una sola empresa que haya querido llegar a Nuevo León", dijo.
mvls