Luego que 71 familias fueran desalojadas de sus hogares, ubicados en la colonia Floresta del Colli, se detectó que algunas personas tienen infecciones en las vías respiratorias, principalmente menores de edad, esto después que se realizara la primera jornada de salud realizada por el CUCS.
Esta jornada fue por iniciativa de la UDG en conjunto con la Unidad de Apoyo a las Comunidades Indígenas (UACI), la cual contó con la participación de un equipo de enfermería encargado de hacer la toma de signos vitales estrategias de detección de diabetes, hipertensión y obesidad, toma de presión sanguínea, niveles de glucosa en sangre, peso y talla.
Además contó con más de cuatro médicos encargados de dar consulta general y un equipo de psicología que estará realizando actividades de integración y manejo de emociones con los niños.
Por el momento se ha detectado que este padecimiento está en un primer nivel, pero si llegara a avanzar a un segundo y tercer nivel, se brindará atención en módulos de hospitales civiles de manera gratuita.
“Están presentando mucha tos, mucho moquito, al parecer son infecciones virales leves ya que se les han practicado a todos los niños que hasta el momento son ocho, pruebas de covid, y todas han dado negativo favorablemente, así como también pruebas de dengue y todas han dado negativo que son infecciones gripales comunes”, declaró el Dr. Jesús Mora, encargado de la unidad de Servicio Social del CUCS y responsable de Brigadas en el Centro.
Gabriela Juárez Piña, responsable del Programa de Salud Intercultural para Pueblos Originarios adscritos a la UACI dijo que hay familias que aún no han sido desalojadas, pero viven por la zona donde sucedió esto, por lo que se mantienen con temor que les suceda lo mismo.
Además, la responsable del UACI comentó que se les ha brindado despensa y víveres a las personas afectadas por el derrumbe de sus casas, así como a las personas que recientemente se les hicieron los chequeos médicos.
Desalojados sin respuesta
Una madre de familia, afectada por el desalojo declaró que se siente agradecida por la ayuda médica y de despensa que se les ha brindado, pues los últimos días han sido difíciles para ellos por el tema del desalojo, y ahora por los problemas respiratorios que varios han presentado. Aunque lamentó que siguen sin darles un lugar para reubicarlos, esperando que las autoridades correspondientes les den soluciones pronto.
Cabe recordar que las viviendas fueron demolidas el pasado 27 de abril por CONAGUA, gobierno municipal y estatal, según argumentaron, por invadir el cauce del Arroyo El Seco ya que es propiedad federal.
MQ