La iconografía tradicional representa a San Antonio Abad portanto el bastón de los ermitaños; generalmente va acompañado de un cerdo que lleva una campanita al cuello. Dicha representación tiene su origen en el hecho de que los “Antonianos” criaban cerdos para, además de alimentar con estos a los pobres, también usaban la grasa de estos animales para ungir a los enfermos.
La tradición es que el día de la fiesta litúrgica de San Antonio, 17 de enero, se bendicen los establos y a los animales domésticos, como celebración y conmemoración al santo.
Esta bendición hacia las mascotas se celebra desde hace años, y tiene que ver con los pasajes religiosos narrados por iglesias cristianas y católicas. En algunos casos dicha tradición no se realiza justo el 17 de enero, sino en fines de semana en los que la gente cuenta con tiempo para llevar a sus mascotas a los centros religiosos.
Las personas que llevan a sus mascotas a bendecir, mayormente lo hacen por razones como la enfermedad del animal o que éste es nuevo integrante de la familia.
¿Quién fue San Antonio Abad?
San Antonio Abad, conocido como el patrón de los animales, fue un monje cristiano perteneciente al movimiento eremítico, del que también se le reconoce como fundador.
Abandonó todos sus bienes para dedicarse a una vida ermitaña de servicio vocacional. Este hecho tuvo lugar poco después de perder a sus padres.
Aunque de su vida previa a la consagración religiosa no se tiene mucha información, se puede decir que llevó una primera juventud tranquila y sin preocupaciones, y a los veinte años escuchó el llamado al servicio y decidió dedicar su vida a ello.
Una de las afirmaciones más populares que se realizan en torno a la figura de San Antonio es que en varias ocasiones fue tentado por el demonio a través de imágenes y sensaciones que consideraba impuras y que le alejaban del objetivo que tenía como fundamento de su vida, que era la entrega absoluta a dios y a la santidad.
Cabe mencionar que a lo largo de la historia del arte, muchos artistas como Paul Cézanne, El Bosco, Eleona Carrington y Diego Rivera, le han dedicado obras a esos momentos decisivos en la vida de San Antonio Abad. En el caso de Eleonora, es ésta una de sus pinturas maestras.
MLMG